? El complejo de piscinas municipales de Son Hugo, que necesita de una inversión de 2,6 millones de euros, se ha convertido en un quebradero de cabeza para los actuales responsables del Ajuntament de Palma. Políticos que han debido abordar drásticas medidas, como la de clausurar totalmente el acceso a sus usuarios habituales, después de haber clausurado antes las dos exteriores, por su mal estado. Una serie de incidencias que desde Cort se apunta que son fruto de un mal servicio de mantenimiento después de que lo dejase la constructora que se encargó de esa responsabilidad los diez años posteriores a su inauguración, con motivo de la Universiada de 1999.