El experimentado defensa del Badalona Miguel Robusté -ausente en el encuentro de hoy por lesión- desnudó con su gol las carencias del Baleares de la pasada campaña, con Christian Ziege. Fue el 23 de octubre, y el partido acabó con 0-1 a favor de los catalanes. En la vuelta, 3-1 en contra de los blanquiazules y fin de ciclo para el técnico alemán. Este mediodía no se juega un fin de ciclo, aunque un triunfo reforzaría la tocada estabilidad del banquillo de Armando de la Morena. Se buscará poner punto y final a una dinámica de resultados en casa -tres empates y una derrota- que condenan al equipo a la mediocridad más absoluta a nivel clasificatorio, más cerca de la zona de peligro que del ascenso. En este sentido, las matemáticas no engañan.

Y pese a que el Badalona de esta campaña está de momento lejos del potencial de la pasada, con ausencias como las del ya mencionado Robusté por lesión, Fran Grima, fichado por el Real Mallorca y Gerard Oliva, nueva referencia ofensiva de los blanquiazules, la realidad de los números indica que los de Manolo González, con su habitual fútbol rocoso, práctico y ordenado, están ya dos puntos por encima.

Y eso que como visitantes, los 'azulones' no son fiables, arrancando dos empates y encajando dos derrotas, una de ellas por goleada (5 a 1 frente al Elche). Por todo ello, se enfrentan dos onces de contrastes. Dos equipos con dinámicas opuestas. Los catalanes, fuertes en casa, flojos como visitantes y sumando ocho de los últimos 12 puntos jugados. Y el Baleares a la inversa: notables fuera de casa -obviando el mal partido en Sabadell- mientras que en Son Malferit los de De la Morena no ganan desde el pasado 13 de agosto, frente al Santanyí, en el 'Nicolás Brondo'. Es decir, en Liga aún no se han estrenado en casa con victoria, acumulando hasta el momento un nefasto 3 de 12.

"En este partido nos jugamos la vida, y hay que ganarlo sí o sí'. La frase corresponde al joven defensa blanquiazul, Alberto Villapalos, y que define de forma gráfica el estado de ansiedad de un equipo que sabe que su mejoría pasa por estrenarse en casa. Por todo ello, es previsible que el equipo ponga los cinco sentidos para capturar los tres puntos frente a un rival que ni mucho menos tiene la pegada de la pasada temporad. Y en el Atlético Baleares, a las habituales bajas de Uche, Delgado y Kike, cabe añadir la de Biel GuaspBiel , con problemas en sus isquiotibiales.

El resto, están disponibles para el partido de este mediodía, y en el que se llevará a cabo antes de empezar el encuentro un sentido homenaje al ex jugador del Baleares, Joan Vich, actual futbolista del Constancia.