Ante la duda, ratificación inmediata. Eso es lo que ha hecho el director deportivo del Atlético Baleares, Patrick Messow, ante las dudas que entre un buen sector de la afición blanquiazul empieza a despertar la errática trayectoria del equipo, con su técnico Armando de la Morena a la cabeza.

Messow, ante los micrófonos de Ser Deportivo Baleares no solo descarga a De la Morena de la responsabilidad de los malos resultados -"hay cien por cien confianza con el míster y con el trabajo del cuerpo técnico. Y ahí no va a pasar nada", dijo,- sino que la traslada a los futbolistas -"antes podríamos hablar de los jugadores, que a lo mejor no rinden lo que han de rendir, pero en cuanto al cuerpo técnico puedo comunicar tranquilidad y confianza"- por lo que descarta por completo que el próximo domingo frente al Badalona sea un plebiscito para el propio De la Morena.

"No, no hay opción de que pase nada con el cuerpo técnico", afirmó tajante el director deportivo blanquiazul. Dicho esto, sigue mostrando plena confianza en la plantilla confeccionada para esta temporada y de que la situación deportiva se puede revertir. "Creo que aún tenemos margen para mejorar, y algunos jugadores tienen margen para mejorar también. Hay que sacar el máximo de cada jugador, y en eso vamos a trabajar en las próximas semanas. Cuando los jugadores sacan lo que pueden, podemos ganar a todos porque tenemos un equipo con talento, mucha aptitud y lo tiene que demostrar en el campo. Nos toca hablar con los jugadores y sacar el máximo de cada uno. Si los jugadores están al cien por cien, podemos ganar a todos".

Estas palabras, sin duda, pueden crear malestar entre los jugadores, que se sienten señalados por el director deportivo. La defensa a ultranza del entrenador, por su parte, puede quedar en agua de borrajas si el equipo no es capaz de cambiar la dinámica de malos resultados. La ley del fútbol es inexorable y el Atlético Baleares no se salva de ella. Y si los resultados no llegan, al presidente Ingo Volkmann no le quedará más remedio que hacer un relevo en el banquillo.

De momento, la política del club está clara: defensa a ultranza del entrenador y una advertencia a los jugadores. Ya tras el partido ante el Centre d´Esports Sabadell, el pasado domingo, De la Morena dijo que el equipo estaba siendo víctima de errores puntuales. El último, el de Sergio Sánchez que costó el gol que significó la derrota en el terreno del conjunto arlequinado. El equipo blanquiazul ocupa la novena posición tras ocho jornadas disputadas con diez puntos, a cinco de la zona de fase de ascenso que marca el Lleida, y cuatro por encima de las plazas de descenso.

Dudas con Oliva y Guasp

Tras la jornada de descanso disfrutada ayer por el primer equipo blanquiazul, vuelve a la tarea la primera plantilla. Y lo hace con dos nombres propios que en la sesión del pasado lunes no se ejercitaron: Gerard Oliva, que está pasando un proceso febril, y Biel Guasp, que el pasado domingo fue sustituido en Sabadell por Migue Marín por lesión en uno de sus isquios, y del que habrá que calibrar su evolución tras las diferentes pruebas realizadas.

Del resto, lo de siempre: Kenechukwu Uche y Julio Delgado, que ya están apurando el plazo de recuperación para estar de nuevo a disposición del Armando de la Morena, mientras que Kike -también lesionado- sigue descontando el número de partidos que tiene de sanción. Kike fue castigado con seis encuentros, y aún le queda cuatro por cumplir.