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Minuto 91

Un derbi para disfrutar

A la espera de tiempos mejores, el Atlético Baleares-Mallorca del próximo sábado, que se verán las caras por primera vez en...

El Atlético Baleares regresó de Formentera con triunfo.

A la espera de tiempos mejores, el Atlético Baleares-Mallorca del próximo sábado, que se verán las caras por primera vez en los últimos 36 años, se presenta como un derbi para disfrutar. Nos encontramos en la tercera jornada y, aunque cada punto y partido es importante, las urgencias no existen para ninguno de los dos equipos. Ganar el encuentro supondría un golpe de moral para cualquiera de los dos equipos mientras que una derrota un tropiezo para nada insuperable al estar en los albores de la competición.

Llegan ambos equipos en un buen momento anímico. El Mallorca invicto e imbatido mientras que el Atlético Baleares reforzado por su victoria en Formentera. El equipo de Vicente Moreno debe mejorar sus prestaciones en ataque una vez demostrada su gran solvencia defensiva. El de De la Morena, ratificar los buenos momentos que ha exhibido en la primera jornada ante el Villarreal y ayer frente al Formentera. Se presenta un derbi apasionante que, a escasos cinco días de su disputa, se desconoce si se podrá ver por televisión. Sería una lástima porque solo dos mil privilegiados -la capacidad de son Malferit- serían testigos de un duelo inédito en las tres últimas décadas.

Marcus Cooper Walz, suma y sigue. Un año después de colgarse la medalla de oro en los Juegos de Río, Marcus Cooper Walz, natural de Oxford pero mallorquín de pura cepa, ha proseguido este fin de semana con su colección de medallas, ahora en el Campeonato del mundo de piragüismo celebrado en la República Checa. Un oro y una plata. Y solo tiene 22 años. Tras proclamarse campeón olímpico, dijo que sus Juegos no eran los de Río, sino los de Tokio 2020, cuando contará con 25 años. Sin ninguna duda va por el buen camino para considerarse doble campeón olímpico.

Nadal-Federer, el duelo está servido. Si se cumple la lógica, aunque en tenis no es fácil, es muy posible que el 9 de septiembre se enfrenten por trigésimo octava vez los que posiblemente sean los dos mejores tenistas de la historia, Rafel Nadal y Roger Federer. No solo porque en el US Open que empieza hoy faltan tenistas de la talla de Djokovic, Murray, Nishikori, Wawrinka y Raonic, sino porque los dos veteranos del circuito han dominado los grandes de este año: Australia y Wimbledon para el suizo y Roland Garros para el mallorquín. Que un jugador de 36 años y otro de 31 sean los dominadores del circuito es la evidencia de que la nueva generación no está al nivel de la actual. Acabarán gobernando porque la edad no perdona, no porque vayan a ser mejores que los que algún día -esperemos que tarde- colgarán la raqueta.

Miquel Bestard ha sido uno de los pocos presidentes de territoriales que no han presentado la dimisión como miembro de la Federación Española de Fútbol pese a ser uno de los firmantes que reclamaban la dimisión de Ángel María Villar. El bueno de Bestard alegó que debía consultarlo con su junta directiva y abogados de la Balear. Si tiene claro que lo mejor para el fútbol español es la convocatoria de elecciones, la lógica indicaba que dimitiera como catorce de sus colegas. Es necesaria una explicación. Para que nos aclaremos.

Dembélé. Tiene todo el futuro por delante porque solo cuenta veinte primaveras, dicen que va para auténtica figura, que puede ser el nuevo fenómeno en un futuro no muy lejano. Todo lo que quieran. Pero pagar 105 millones de euros más 40 en variables es una auténtica barbaridad, con mucho de obsceno. ¿Para qué sirve el fair play financiero?

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