Mario Mola: "El Mundial no se decidirá hasta la Gran Final de Rotterdam"

Mola, nacido en Palma hace 27 años y que logró en Edmonton su cuarta victoria en lo que va de temporada -después de las de Gold Coast (Australia), Yokohama (Japón) y Hamburgo (Alemania)- comentó, en conversación telefónica con Efe desde Canadá que su triunfo "no fue fácil".

"Cuando uno sale a competir en pruebas de este nivel, no hay carrera fácil; y, sin duda, no lo fue, aunque nadé relativamente bien", indicó Mola, horas después de ganar la prueba, disputada en distancia sprint, la mitad de la olímpica, es decir: 750 metros de natación, veinte kilómetros en bici y cinco más de carrera a pie. Una prueba en la que el australiano Jacob Birtwhistle fue segundo y el surafricano Richard Murray, tercero; y en la que los otros dos españoles que acompañan a Mola en los tres primeros puestos del Mundial, el talaverano Fernando Alarza, y el gallego Javier Gómez Noya -único quíntuple campeón mundial de la historia-, acabaron noveno y sexto, respectivamente. "Hacer una buena natación hace las cosas más sencillas, aunque, por delante, se formó un grupo de unos diez o doce que sacaron unos segundos de ventaja en la primera vuelta del ciclismo, por lo que en los primeros compases de la bici tuvimos que trabajar fuerte y bien para darles alcance. Tener ahí a Javi (Gómez Noya) y al noruego (Kristian) Blummenfelt, gente que siempre trabaja y nunca se conforma con ir en el segundo grupo, hizo que, luchando, pudiéramos darles alcance", indicó 'SuperMario'.

"Luego, la bici ya fue bastante más cómoda durante las últimas tres o cuatro vueltas, pero, después, la carrera a pie tampoco fue sencilla", explicó Mola, que ahora lidera el Mundial con 3.664 puntos - 492 más que Alarza y con 674 más que Gómez Noya- y que comentó el desenlace de la prueba, cuando Birtwhistle sufrió un tremendo despiste, al lanzar un fuerte sprint, pensando que entraba en meta, cuando aún quedaba por darse la última de las tres vueltas del circuito de carrera a pie.

"Al principio de la carrera (a pie) hubo más control y cambios de ritmo, pero, al paso de la segunda vuelta fue cuando el australiano Jake Birtwhistle pensaba que se acababa la carrera y atacó a fondo. Yo también pensé que ahí se acababa la mía, porque, realmente, mantener el ritmo que él puso, a falta de kilómetro y medio, era imposible de seguir", indicó el astro balear, que, antes de ganar el campeonato del Mundo el año pasado, había capturado bronce en el certamen de 2013 y plata mundial en los de 2014 y 2015 (durante las tres temporadas en las que Gómez Noya capturó los últimos tres de sus cinco títulos).

"Por fortuna, tuve la capacidad de poder apretar un poco y llegar hasta él, para aprovechar luego la cuesta y buscar a partir de ahí la victoria", apuntó. "Mucho hizo él (Birtwhistle) con no haberse venido abajo, porque esprintar a falta de una vuelta merma mucho las fuerzas, así que su segundo puesto tiene mucho mérito", dijo Mola, tras ganar una prueba en la que el inglés Jonathan Brownlee fue cuarto y el francés Raphael Montoya, quinto.

"En general, no puedo más que estar contento con este resultado. Soy consciente de que es un paso más con miras a llegar lo mejor posible a la Gran Final", comentó el campeón mundial, tras presentar sólida candidatura a revalidar título. A falta de otras dos pruebas antes del cierre de Rotterdam (las de Montreal, asimismo en Canadá, el próximo fin de semana; y Estocolmo, el último fin de semana de agosto), Mola tiene cuatro victorias; y para la general final suman los cinco mejores resultados del año, más el de la última prueba, que puntúa un 50 por ciento más que las anteriores (el primer puesto, por ejemplo, otorga 1.200 puntos, en vez de 800).

"Pero, igualmente, sé que, así como es importante haber sumado buenos resultados, es muy importante hacer una buena Final", recalcó el campeón mallorquín, Diploma olímpico en los pasados Juegos, los de Río de Janeiro (Brasil), el año pasado, en los que acabó octavo.

"Todo lo que pueda sumar ahora, fenomenal, pero hasta la Gran Final de Rotterdam no habrá nada decidido", explicó el vigente campeón del mundo de triatlón, antes de partir hacia Montreal, sede, el próximo sábado, de la antepenúltima prueba del Mundial 2017, que se disputará de nuevo en distancia olímpica (1.500 metros a nado, cuarenta kilómetros en bici y diez más corriendo).

"Nunca competimos en Montreal, así que vamos con muchas ganas de hacerlo; y de hacerlo bien allí. Será de nuevo en distancia olímpica, un reto diferente", indicó Mola desde Edmonton, donde la bermudeña Flora Duffy hizo exactamente lo mismo que él: firmó su cuarta victoria (seguida) del año y dio un paso gigante para revalidar título.

"Hace tiempo que no compito en distancia olímpica. La última vez fue en Yokohama (a mediados de mayo), así que esperamos mantener el buen estado de forma. Esta semana toca descansar, tomárselo con calma, hacer entrenamientos ligeros; y, ojalá llegar en las mejores condiciones posibles", explicó el líder del Mundial de triatlón.