De nuevo se repite la historia en el baloncesto mallorquín. Pese a la brillante campaña protagonizada por el Bàsquet Calvià en su debut en el grupo C de la Liga EBA -segundo en su conferencia y tercero en la fase de ascenso- el club calvianer debe renunciar a continuar compitiendo en la Liga Española de Baloncesto Aficionado por el mismo motivo que en su momento provocó el adiós al senior del Andratx, o el más actual del Muro Basket Academy: la falta de músculo económico para afrontar una categoría tan costosa como es la EBA.

En un comunicado colgado en su página web, los calvianers explican que "la junta directiva ha decidido de forma unánime renunciar a la plaza conseguida tras muchos años de trabajo por la falta de apoyos institucionales y a los problemas añadidos que provoca la insularidad que, como le sucede al resto de entidades deportivas de la comunidad balear, produce un situación de grave desventaja a los equipos de lasBaleares respecto a los equipos del resto de comunidades autónomas".

De hecho, la continuidad del proyecto EBA ponía en serio peligro la existencia del propio club, fundado hace 35 años en el colegio 'Ses Quarterades' de Calvià. "Bajo ningún concepto la directiva está dispuesta a poner en peligro la viabilidad económica del club y su futuro, así como perjudicar a los equipos base del club por delante del primer equipo. Ante esta situación, el Bàsquet Calvià considera excesivamente arriesgado emprender una nueva aventura en la Liga EBA y en los próximos días iniciará los trámites para inscribirse en la Primera División Nacional".