Mario Mola, nacido hace 27 años en Palma -bronce mundial en 2013, plata las dos temporadas siguientes y campeón en 2016- está en Madrid, donde se celebra hoy la prueba de la Copa del Mundo de triatlón. El mallorquín no compite, pero valora cómo está viviendo su sensacional arranque de curso y qué planes tiene para lo que queda de año.

-Menudo arranque de temporada. Impresionante, ¿no?

-Sí, no nos podemos quejar. Uno empieza siempre con las mayores ambiciones y objetivos, pero después que las cosas salgan es para estar más que contento. En la primera carrera (en Abu Dabi) sólo pude hacer un octavo (puesto), pero en las últimas dos (que ganó, en Gold Coast y Yokohama) la verdad es que el resultado ha acompañado. Y ahora, a pensar en volver a trabajar la base, recuperar un poco después de tanto viaje, con miras a la próxima carrera, que será en Hamburgo (Alemania).

-Entonces, ¿no irá a Leeds?

-En principio, no. Había que descartar alguna. Y gracias a los dos últimos resultados aprovechamos para hacer un periodo sin competir, para volver a entrenar bien. Los viajes trastocan mucho el entreno y las competiciones.

-¿Desde Hamburgo ya hará todas las pruebas hasta el final del Mundial, o todo irá en función de los resultados?

-Dependerá de los resultados. Sólo puedes descartar con total tranquilidad si has ganado cinco carreras, porque evidentemente Javi (Gómez Noya, quíntuple campeón mundial y tercero en el Mundial) y Fernando (Alarza, segundo) van a seguir compitiendo. Y veremos cómo compite Jonathan Brownlee, que es el que también tenía la intención de disputar el Mundial. Todo resultado, a no ser que sea un primero, es mejorable. Veremos cómo se dan las próximas, pero el objetivo, de momento, es estar en Hamburgo y en las dos de Canadá (en Edmonton, el último fin de semana de julio; y Montreal, el primero de agosto). Y a partir de ahí, ver dónde estamos y qué podemos hacer.

-España es una potencia mundial en su deporte. ¿Se imagina a tres españoles copando el podio en una prueba del más alto nivel internacional?

-Ojalá, ojalá. Porque tanto Javi (Gómez Noya), evidentemente, como Fernando (Alarza) y también (el tinerfeño) Vicente (Hernández) tienen capacidad para acabar en el podio de cualquier carrera. Es algo muy difícil, porque el resto también quiere subir al podio y hay mucha competencia, pero sólo el hecho de que nos planteemos esa posibilidad, es para estar más que satisfechos de cómo está el triatlón en España.

-Está en Madrid, pero sólo para apoyar a Carol (Routier, su novia, triatleta y olímpica) ¿no?

-Sí. Tengo un evento con uno de nuestros patrocinadores, Sacyr, y este domingo estaré dando apoyo a Carol, porque muchas veces es al revés: es ella la que me apoya en carrera a mí. Intentaré ayudarla en lo que pueda. Para eso estamos.

- Después de Madrid y hasta Hamburgo, ¿qué hará?

-Ahora llevamos una semana entrenando en Banyoles (localidad natal de Routier) y seguiremos allí durante un par de semanas. Luego haremos un bloque de entrenamientos en altura, varias semanas, en la zona de Font-Romeu (Francia), que es donde nos hemos entrenado los últimos años, para intentar llegar en un buen estado de forma y fresco de carreras a las próximas competiciones, que va a ser intenso también.

-El Mundial tiene un claro color español hasta el momento, pero, aparte de los españoles, ¿quiénes cree que estarán allí al final, luchando por el título?

-Espero a los surafricanos, que están compitiendo muy bien. Richard (Murray) y Henri Schoeman, que son cuarto y quinto del ránking ahora mismo, estarán ahí. Y espero que algún francés, si Vincent (Luis) acumula esas cinco carreras, esté en la parte alta de la clasificación. Y está Jonathan (Brownlee), que se perdió las dos primeras pruebas por lesión y en la tercera (Yokohama) se quedó fuera por esa caída con la bici. Necesita puntuar en todas las carreras. Veremos.

-Usted es muy meticuloso. ¿Se plantea su carrera por ciclos olímpicos o la tiene prevista entera ya en su cabeza?

-Quiero seguir mejorando y todavía tengo trabajo por hacer. Aún puedo mejorar en el agua, para disminuir la desventaja, que a veces es insalvable, según las circunstancias de carrera. Esa es mi prioridad ahora: seguir trabajando y mejorando. Mi primer objetivo es el Mundial. Y a partir de ahí, sacar lo mejor posible de cada una de las pruebas, porque aún queda tiempo, pero no nos daremos cuenta y en breve empieza la clasificación para los Juegos de Tokio (en 2020).