De extraordinario hay que calificar el papel del Palma Air Europa en la eliminatoria ante el Breogán, uno de los más afamados equipos de la LEB Oro y confeccionado para el ascenso a la ACB. La mayoría daba por hecho que quedaría eliminado, como así ha sido, pero seguro que pocos imaginaban que el equipo de Xavi Sastre presentaría tanta batalla. Ha caído como un grande, con la cabeza muy alta, en una temporada complicada por muchos motivos. Se presentan a partir de hoy mismo muchos obstáculos a superar, el principal, la retirada del patrocinio del Palma Air Europa, un sostén imprescindible para la buena marcha de la entidad en las últimas temporadas.
Habrá que ver a qué nivel afecta este adiós de la compañía de Hidalgo, pero parece claro que, sin su concurso, las expectativas de cara a la próxima temporada van a ser más modestas. Los dirigentes del Bahía San Agustín se han caracterizado siempre por tocar con los pies en el suelo, no estirar más el brazo que la manga, y ahora seguro que no va a ser una excepción. El club se ha de mover de acuerdo a sus posibilidades, y si el objetivo la próxima campaña ha de ser la permanencia no pasa nada. Son los tiempos que corren.
