"Estamos muy contentos y satisfechos de ver cómo poco a poco nuestra gran ilusión y deseo se va convirtiendo en realidad". Así se expresó ayer el presidente del Independiente, Francisco Moranta, sobre la colocación esta semana del césped artificial sobre el vetusto terreno de juego de La Antoniana de Palma, que era el único campo de tierra en la ciudad y de los pocos en Mallorca.

Y es que las esperadas obras de adecuación de este terreno de juego, reinvidicadas históricamente por el Independiente del Camp Redó, están llegando a su fin tras muchos años de protesta al considerar el club que estaban abandonados por las instituciones públicas. "No sabemos cuánto queda aún, pero ver ya el tapiz verde sobre el terreno de juego me produce mucha emoción. Hemos luchado mucho para conseguirlo y parece que esto va a ser una realidad", añadió Moranta.

Tras varias semanas de adecuación del campo para la colocación de la hierba sintética, que es de última generación, en la que los obreros igualaron la superficie y realizaron las obras para la canalización del agua, tanto de riego como residuales, ahora ha tocado el tiempo para la colocación del césped, que es la parte más vistosa y colorida. Muchos son los curiosos que desde el miércoles siguen la progresión de una obra que debía empezar hoy y que se adelantó dos días.

"Ahora queda la parte final como la colocación de las porterías, banquillos, bocas de riego y, entre otras, marcar el campo. Nos gustaría estrenarlo ya esta temporada, pero no sabemos si será posible. Pensamos que pueden quedar unas tres semanas de trabajo ya que falta el caucho y muchas cosas", dijo Moranta.

El alcalde de Palma, José Hila, y los responsables del IME tienen previsto visitar este próximo lunes La Antoniana para ver personalmente cómo evoluciona la obra.