Biel Ribas, portero mallorquín del UCAM Murcia, ha sido sancionado por el Comité de Competición de la Federación Española de Fútbol, con cuatro partidos de suspensión por el puñetazo que dio al jugador del Mirandés Alex Quintanilla en el partido de la vigésima novena jornada de Segunda A, disputado en Anduva.

La acción ocurrió poco antes del final del encuentro, que terminó 1-1. Ni el colegiado, David Pérez Pallás, ni sus asistentes, se percataron del hecho y por ello no quedó reflejado nada en el acta. Ante eso, el Mirandés presentó una denuncia el 13 de marzo.

Según Competición los hechos denunciados quedan "inequívocamente acreditados mediante las imágenes aportadas junto con la denuncia" del Mirandés. Así mismo, indica que "no rearbitra un hecho sobre el que el colegiado no adoptó decisión alguna, fundamentalmente, porque el agresor busca un momento en el que el árbitro no se percata de la reprochable acción".

Y destaca que la reacción del guardameta fue "absolutamente desproporcionada tanto en el momento en que se produce (no se zafa sin solución de continuidad del contrario, sino que espera y busca el momento de agredirle) como en su intensidad (fuerte puñetazo dirigido al rostro)".

Por lo tanto acuerda suspender durante cuatro partidos a Biel Ribas por infracción del Código Disciplinario, con multa accesoria en cuantía de 800 euros al club y de 3.005 al portero mallorquín.