El fútbol base de las islas se detiene contra la violencia en los campos de fútbol. Quinientos partidos, de prebenjamín a cadete, pararán este fin de semana en el minuto tres como acto de repulsa contra la batalla campal que protagonizaron varios padres el pasado domingo durante un encuentro de infantiles en Alaró.

El parón se realiza en el minuto tres de los encuentros. La iniciativa fue la única medida concreta que salió de la reunión de urgencia mantenida en la sede de la Balear el lunes por la tarde entre representantes de clubes, árbitros y administraciones públicas para establecer una hoja de ruta contra la violencia en el fútbol.

Acto central en Alaró

El acto central ha tenido lugar esta tarde en el campo del Alaró, donde se produjeron los incidentes al inicio del partido que ha enfrentado al equipo local de la categoría cadete con La Unión.

En el acto estuvieron presentes el director general de deportes del Govern, Carles Gonyalons, la directora insular de Deportes, Marga Portells, la alcaldesa de Alaró, Aina Munar, y el concejal de Deportes, Roger Anthony, además del presidente de la Federación Balear de Fútbol, Miquel Bestard, y Pep Sansó, presidente del Comité de Entrenadores, así como los directivos de ambos clubs.

El acto se inició con la salida al campo de los dos equipos acompañados por sus padres. Una vez en el terreno de juego se desplegó una pancarta en la que se ponía de manifiesto el rechazo a la violencia y el apoyo al fútbol. Los dos equipos posaron juntos en el centro del campo con padres, políticos y directivos, antes de empezar el partido. Posteriormente se inició el partido y a los tres minutos el colegiado interrumpió el partido y los dos equipos volvieron a formar para guardar un minuto de silencio.