La desatención con "mala fe" a una reclamación, de 6.518 euros, ha deparado una sentencia de condena, además de un decreto de embargo, contra el Institut de l'Esport Hípic del Consell de Mallorca (IEH). Organismo que preside Jaume Ramis, avalado en su cargo por el conseller Joan Font y el presidente de la institución insular, Miquel Ensenyat.
La resolución sobre la condena, y el posterior auto de embargo, observa que la reclamación que en un principio era de 6.518 euros le pasará a costar ahora al Institut de l'Esport Hípic del Consell de Mallorca más de 9.000. Sin contar la posible minuta a afrontar por los honorarios del abogado al que se confió el caso. Un conocido del presidente Jaume Ramis, quien hasta su proclamación -el 9 de julio del 2015- ejerció de profesional del derecho.
El proceso judicial contra el IEH fue instado por el veterinario Jorge Cañellas, defendido por la letrada Alicia Salom, y visto por el Juzgado de Primera Instancia número 4 de Palma. La sentencia condenatoria contra el organismo del Consell de Mallorca se dictó el 27 de septiembre del 2016. Y en su escrito consta: "Existió mala fe por parte de la parte de la demandada en la dilación de los pagos de las cantidades adeudadas".
Y el decreto de embargo es del 10 de febrero de 2017, el viernes de la pasada semana. Y en su texto se resuelve: "Retener los saldos bancarios en cuentas de cualquier clase abiertas en entidades de crédito, ahorro y financiación a favor de la entidad ejecutada, el Institut de l'Esport Hípic".
En la sentencia, de la magistrada juez María Isabel Frade, consta que el veterinario presentó su demanda el 6 de junio, con una reclamación de 6.518.70 euros, más intereses, y que el 27 de septiembre se celebró la audiencia previa, compareciendo todas las partes.
Fue cuando Jorge Cañellas ratificó que en 2014 emitió siete facturas al IEH por importe de 10.220 euros, de los que solo percibió 8.073.80, quedando pendientes de cobro 2.146.20. Y que, de diciembre de 2015 a marzo de 2016, prestó otros servicios, por valor de 4.372.50 euros, emitiendo cuatro facturas que quedaron pendientes de pagos en el momento de interponer su demanda. Acción que adoptó tras requerir el cobro, vía correo electónico, resultando "infructuosas" sus peticiones.
Admitió la realidad de la deuda
El Institut Hípic admitió en la audiencia previa "la realidad de la deuda", aunque informó que antes de tener conocimiento de la interposición de una demanda en su contra realizó al veterinario dos pagos, el 6 y el 21 de junio de 2016, por valor de 1.399.20 euros y 1.224.30. Así como que el 27 de julio de 2016 pagó 1.399.20 euros y el 20 de septiembre otros 349.80.
Igualmente, reconoció los requerimientos de pago del veterinario, aunque defendiendo que "lo reclamado por esa vía no se corresponde con lo que se le reclama en la demanda". Y oponiéndose a la aplicación de intereses y al pago de las costas judiciales.
Frente a todo eso, la magistrada juez estimó íntegramente la demanda del veterinario y falló "condenar al Institut de l'Esport Hípic" a abonar los 2.146 euros impagados, más intereses - "atendiendo a las medidas de lucha contra la morosidad"-, y ofreció opción de impugnación, mediante recurso de apelación.
