El Palma Futsal dejó escapar anoche dos puntos de Son Moix con un gol postrero del exjugador del conjunto mallorquín, Juan Pizarro, a un minuto del final, que aprieta todavía más la pelea por la cuarta plaza. Todo un contratiempo para los de Juanito, que llegaron a dominar por dos a cero.

El duelo empezó de cara para la escuadra isleña muy temprano. Los tantos de Paradynski y Joselito en los primeros cuatro minutos de encuentro obligaron al Levante a espabilar y buscar la meta defendida por Nico Sarmiento (2-0). Con el marcador en su contra, el conjunto granota disputó el balón al Palma, que no estaba cómodo. De esta manera ambos conjuntos disfrutaban de llegadas. Los visitantes con Sena, que se topó con Nico, mientras que Carlitos se quedó con las ganas tras una vaselina que se marchó alta. A menos de un minuto para el descanso los colegiados expulsaron a Maico por doble amonestación y el Levante jugó las últimas acciones de la primera mitad con superioridad numérica, pero el Palma resistió como pudo.

Las primeras ocasiones de la segunda mitad serían de un Levante volcado en ataque que se toparía una y otra vez con Sarmiento hasta que la insistencia granota se convirtió en gol. A los cinco minutos de la primera mitad, Lucas Tripodi recortaba distancias al aprovechar un rechace de un disparo del propio jugador cedido por el Palma y anotaba el 2-1. Tras el gol encajado el conjunto mallorquín despertó, pero no lo suficiente. De hecho, Lucho culminó a placer un gran contragolpe del Levante para empujar el balón a puerta vacía y poner las tablas en el marcador a siete minutos del final (2-2). El Palma Futsal no se conformaba con el empate y Juanito decidió buscar el gol de la victoria con portero-jugador y Diego Fávero se topó con el palo. Paradynski, sin embargo, no perdonó con un remate de cabeza que primero golpeaba en el palo para acabar entrando (3-2). Y cuando ya todo apuntaba al triunfo de los baleares, a poco más de un minuto para el final y sería el Levante quien usaría la estrategia de portero-jugador con la misma suerte que los locales. Pizarro aprovechaba un rechace de Sarmiento para anotar el 3-3. Toda una decepción.