Las dos piscinas exteriores de Son Hugo estarán cerradas este verano. Una medida que afectará a miles de ciudadanos y a varios centenares de deportistas federados de los clubes palmesanos de natación. El Institut Municipal de l'Esport (IME) ha adoptado esta decisión para acelerar la reforma de unas cubetas que están en mucho peor estado de lo que habían previsto los actuales gestores municipales.
La Federación Balear de Natación (FBN) y los distintos clubes de Palma ya conocen la decisión de clausurar las dos piscinas exteriores. Una situación extraña en Son Hugo, ya que normalmente habían permanecido abiertas de primavera a otoño. Incluso en invierno estaban operativas, aunque en noviembre de 2013 ya se decidió clausurarlas durante varios meses -hasta la llegada del buen tiempo- para ahorrarse el dineral que cuesta su mantenimiento.
La situación ahora es distinta y la necesidad de cierre es por la propia seguridad de los nadadores, según explicó el gerente del IME, José María González, a los clubes y al nuevo presidente de la Federación Balear de Natación, Vicente Cáceres.
Acostumbrado a lidiar con más de un problema desde que aterrizó en el IME, a González no le ha temblado el pulso en mantener cerradas las piscinas con el objetivo de acelerar su reforma. De hecho, ya tomó la decisión de clausurar las piscinas el pasado invierno por el elevado coste de mantienimiento y porque la cubeta se mantenía caliente con una caldera de gasoil, que es ilegal.
Además, se detectó que los vasos de las piscinas tenían filtraciones, tanto en las paredes como en el fondo, y que era necesario repararlos para evitar que se escapara el agua. Los desperfectos se encuentran en las tres cubetas: la exterior, la interior y la de saltos.
Y es precisamente esta última, la piscina en la que está situada la plataforma para los saltos de trampolín, la que representa mayor problema: pierde unos 14.000 litros de agua cada día, según se desprende del informe realizado por los técnicos.
Ante esta situación, y el problema que puede derivar el mal estado de las piscinas exteriores para los usuarios, tanto deportistas federados como los abonados al IME, desde Cort se ha dado orden de que las piscinas exteriores permanezcan cerradas este año durante el verano.
En 2018 toca la piscina interior
El objetivo es iniciar las reformas lo antes posible y que las piscinas ya estén operativas antes de fin de año. Entre otros motivos, porque en 2018 se quiere acometer la obra para remodelar la cubeta interior, que también presenta deficiencias.
Cabe recordar que el Ajuntament de Palma ya está trabajando en el pliego de condiciones para aprobar el proyecto de remodelación integral de la instalación. Las obras tienen un presupuesto de 2'3 millones de euros, dinero que procede de la Llei de Capitalitat, según informó el propio IME en enero. El Institut Municipal de l'Esport informó entonces, además, que la reforma seguirá "criterios de sostenibilidad y eficiencia energética" y que "consistirá en la adecuación de los vasos de las piscinas, la instalación de placas fotovoltaicas, renovación de los sistemas de aire, implementación de sistemas de desinfección por ultravioletas, instalación de mantas térmicas y sistemas de calentamiento de las dos piscinas exteriores".
Según el IME, de esta forma se daría solución a las reclamaciones de los clubes de natación, que destacan la necesidad de realizar entrenamientos en la piscina exterior de 50 metros todo el año. Además, se ofrecería un nuevo espacio a los dos equipos de waterpolo. Cort ya ha explicado a clubes y FBN que están buscando alternativas para cubrir los horarios de entreno durante los meses que estarán las piscinas clausuradas.
En cuanto a los abonados al IME, el Ajuntament tiene previsto anunciar cierre la próxima semana, ya que ahora mismo se están estudiando alternativas para no colapsar piscinas de otros polideportivos y optimizar el uso de las mismas.
