Un gol de Rubén Jurado en la primera mitad permitió al Atlético Baleares conseguir un valioso empate en un complicado desplazamiento a Alcoi. Los alicantinos dominaron buena parte del encuentro pero les faltó más acierto ante un cuadro visitante que tuvo en Aulestia a uno de sus mejores hombres.

No pudo empezar peor el partido para los hombres de Christian Ziege en un partido que se jugó bajo la lluvia. A los seis minutos, y en la primera aproximación del Alcoyano, el equipo alicantino abrió el marcador. Jony Ñíguez no perdonó ante el cancerbero Aulestia y puso por delante a los locales. Al Atlético Baleares no le tocaba otra que reaccionar ante el madrugador tanto en El Collao. A partir de entonces arriesgó algo más en defensa y su técnico ordenó adelantar a su equipo.

Y el premio llegó transcurrida la primera media hora cuando el delantero Rubén Jurado acertó ante Marc Martínez para devolver las tablas en el marcador. El Alcoyano no se hundió y el tanto visitante le hizo crecerse. Gato, dos minutos más tarde, envió un balón al larguero con Aulestia ya batido. Los blanquiazules siguieron insistiendo hasta la conclusión de la primera parte pero el resultado ya no cambió. Buena culpa fue la solidez defensiva de los palmesanos que dejaron a su rival sin opciones de ataque.

Tras el paso por los vestuarios, el Alcoyano tomó definitivamente las riendas del partido y se volcó en la portería de Aulestia. Así, a los cinco minutos de la reanudación Navarro estuvo muy cerca del 2 a 1 pero le faltó definición.

Bajo la lluvia

La lluvia continuó siendo la gran protagonista del partido y fue dejando el campo muy complicado para la práctica del fútbol donde el mejor equipo que se estaba adaptando era el local. Sin embargo, el Atlético Baleares nunca se rindió y estaba dispuesto a terminar el año con un buen resultado en un campo complicado.

Los últimos minutos fueron de máxima emoción e intensidad en el juego donde el Alcoyano, con los cambios realizados se volcó totalmente en la portería defendida por Aulestia. El balón fue suyo y el peligro caía prácticamente en el área de los baleares.

El Alcoyano apretó pero ya no estuvo a tiempo, e incluso jugó unos instantes con un jugador más por la expulsión del visitante Manu. El resultado no cambió dado que ambos equipos dieron por bueno el reparto de puntos.

El Atlético Baleares cerrará la primera vuelta de la Liga en la novena posición y más cerca del descenso directo que del ascenso. Los blanquiazules están a siete de la cuarta posición y a seis de la parte baja. Un cuadro balear que desde el pasado 6 de noviembre no gana, cuando venció por 0-1 en el Prat. Desde ese día el equipo del alemán Ziege ha disputado ocho partidos (seis de Liga y dos de Copa) sin lograr el triunfo.