El Instituto de Fertilidad Air Europa afronta toda una reválida para la presente temporada en la Liga Femenina 2, en la que debutará en cancha del Ciudad de los Adelantados canario el próximo 1 de octubre.

Con un plantel elaborado con tiempo, pero con nulas concesiones económicas para salirse del presupuesto inicialmente marcado, el equipo que esta temporada entrenará el joven Carlos López -que debuta como técnico en LF2- está llamado a ir de menos a más. Y por dos motivos muy sencillos: la extrema juventud e inexperiencia de la mayor parte de sus efectivos y el hecho de que la plantilla es nueva. No queda nadie de la pasada campaña.

En este sentido, llama especialmente la atención la ausencia de las más que conocidas gemelas Alzamora, Mar y Victoria. Jugadoras que llevaban en el club ocho temporadas tras ser fichadas en edad junior del Sa Pobla, eran sin duda alguna todo un símbolo del pujante y descarado Bahía San Agustín que consiguió hace cuatro campañas su plaza en Liga Femenina 2 frente al CTEIB.

Ahora, a sus 25 años, están volcadas en el proyecto deportivo del Ciutat d'Inca, pero ya son historia en el IFAE. Junto a ellas, Isabel Vila (dejó el baloncesto al inicio del pasado curso), Alejandra Quirante (ahora, en el Estudiantes), la veterana Pola Adrover, que junto con la joven Sofía Cortés también han partido rumbo a Inca o María España (jugará en el Campus Promete de Liga Femenina) conformaban el núcleo duro de jugadoras mallorquinas que ahora ya son historia en el conjunto de la Platja de Palma. Veteranía y minutos en baloncesto FEB que no tienen las nuevas adquisiciones locales.

Adquirir experiencia

De esta forma, las mallorquinas Paula Charro, Gloria Jiménez, Marga Braque e incluso la alicantina Sandra Jordà tendrán que absorber con rapidez la experiencia que sí tienen las foráneas (que no norteamericanas) que el club ha fichado para esta temporada: la veterana escolta Regina Gómez (Rivas Promete) y las jóvenes y prometedoras interiores Patricia Soler (Picken Claret) y la senegalesa Mirieme Cisse (Al-Qazeres); sin olvidarse de la mallorquina Brígida Gual, que pese a su juventud (18 años) ya cuenta con muchos minutos de experiencia de la pasada temporada en LF2 como integrante del Andratx.

A todo esto, uno de los grandes atractivos que tuvo esta categoría durante los dos últimos ejercicios, el derbi mallorquín, tampoco estará presente. El descenso del Andratx y el 'no ascenso' del Bàsquet Nord cuando en la cancha se había ganado su derecho a jugar en superior categoría, provoca que esta temporada el Instituto de Fertilidad esté solo ante el peligro.

Sin derbi, sin rival para incentivar a la ya de por sí escasa afición que se reúne los domingos por la mañana en el pabellón Toni Servera para ver a las mallorquinas, el arranque liguero del equipo esta campaña podría marcar el futuro inmediato del senior femenino del Bahía San Agustín.

Lo tendrá difícil deportivamente hablando. Pero tras los referentes del pasado ejercicio, en el que el papel realizado en concordancia con la inversión realizada fue claramente mejorable, no queda otra que volver a los orígenes del Bahía San Agustín: ilusión, ganas y espíritu de grupo.

Eso y una pizca de suerte pueden dar con la permanencia un año más del IFAE, en el que sus jugadoras ya han comenzado a trabajar, en el segundo escalafón del baloncesto femenino español.