El Atlético Baleares arrancó la temporada con una victoria (0-1) tras un emocionante encuentro ante un Atlético Levante que le puso las cosas difíciles hasta el pitido final.

Pese al intenso inicio de los visitantes, los locales tomaron las riendas del encuentro y lo intentaron una y otra vez, haciendo temblar los cimientos de la zaga balear. El conjunto entrenado por Christian Ziege no lo tuvo muy claro y dispuso de pocas ocasiones claras de gol. Aun así, resistieron la ofensiva constante de los valencianos y el premio llegó cuando todos parecían esperar ya que el partido acabara con reparto de puntos. Esteban, en el minuto 87, aprovechó una de las últimas ocasiones del duelo para hacerse con el balón y enviarlo al fondo de la red para llevarse los tres puntos de la Ciudad Deportiva de Bunyol.

El partido comenzó con un once balear dispuesto a trabajarse los tres puntos desde el primer minuto. Tan solo arrancar, el conjunto visitante presionó arriba a los locales para incomodar y comenzar a crear ocasiones.

Si bien los primeros cinco minutos destacaron por las primeras aproximaciones de los baleares al área rival, apareció Manu Viana, el punta del filial rojiblanco, para tratar de penetrar en la línea defensiva visitante. Lo intentó por la banda izquierda y con varios centros al área, pero estos eran despejados por la defensa sin ningún problema.

Sergio Nanclares también aportaba su granito de arena en ataque y cerca estuvo de verse el Atlético Baleares por detrás en el marcador, después de que el jugador granota asistiera a un Manu Viana que no logró controlar bien el balón.

En los instantes previos al final del primer tiempo, Simon remataba un balón y Cárdenas se veía obligado a intervenir para repeler la sensación de peligro. Más tarde, era Xisco quien ejecutaba una falta enviando el balón al poste.

El Atlético Baleares parecía ir de más a menos y necesitaba volver a ejercer el dominio de los primeros cinco minutos si no quería verse con problemas.

No obstante, el filial granota no dejó de pisar el acelerador y siguió tratando de llevar el balón al área visitante. Viana y Nanclares eran los líderes de un ataque que hacía presagiar lo peor en las filas balearicas, que aguantaban los envites y rechazaban toda aproximación al área.

Las entradas de Rubén y de Kike le dieron un respiro al Baleares para encarar el tramo final del encuentro. Los visitantes resistían en defensa y trataban de aprovechar sus ocasiones. Si bien por momentos parecía más cerca el gol de los levantinistas, era Esteban quien, a falta de tres minutos para el tiempo reglamentario, definía bien ante la portería defendida por Cárdenas y hacía el gol de la victoria. De esta manera, el Atlético Baleares veía recompensado el gran esfuerzo que tuvo que hacer en un encuentro que dominó en gran parte el cuadro local.