Rafel Nadal aseguró ayer, tras ganar el Masters 1.000 de Montecarlo y a dos días de su debut en el Trofeo Conde de Godó, que ganar títulos es "necesario" para seguir ganando confianza y reconoció que ganar por novena vez en Montecarlo le ha dado un 'plus' que espera que tenga continuidad en el Godó, donde también buscará su novena corona.

"Los títulos y victorias son necesarias para la confianza, evidentemente. Ganar Montecarlo es un 'plus' de tranquilidad y confianza. Ganar torneos seguidos no es algo que pase habitualmente pero estoy aquí en Barcelona y voy a hacer lo posible para darme oportunidades", señaló Nadal a la prensa tras una exhibición en el parque de atracciones del Tibidado junto al doble vigente campeón, Kei Nishikori.

Nadal espera dar continuidad en Barcelona a su buen juego. "El torneo es muy complicado y vamos a ver qué pasa. Habiendo empezado no muy bien el año estoy cuarto en el ranking y cerca del tercero y segundo (en la 'Carrera a Londres'). Barcelona es una buena oportunidad para seguir apretando", reconoció.

De todos modos no cree que haber ganado Montecarlo implique ganar ahora el Godó. "Ganar Montecarlo por novena vez es algo muy importante. Ahora empieza otro torneo y cuando uno gana es más fácil seguir ganando y cuando pierdes es más fácil seguir perdiendo, es parte de la vida del deportista. Pero ni ganar garantiza seguir ganando ni perder garantiza seguir perdiendo, pero he conseguido un título importante que me da confianza", se sinceró.

"La clave ha sido que he jugado y competido bien, he conseguido hacer lo que tenía que hacer. Jugué dentro de la pista en el tercer set y por eso dominé, pude terminar de definir con mi drive muchos golpes y conseguí marcar la diferencia. La toma de decisiones esta semana ha sido la correcta porque tengo la calma y tranquilidad para decidir bien y es una muy buena noticia que en el primer torneo de tierra en la gira europea haya podido jugar a ese nivel", celebró.

Eso sí, tanto la final contra Gael Monfils como la semifinal contra Andy Murray fueron partidos exigentes. "Fueron dos partidos muy duros, pero jugando con tranquilidad y sin esos nervios extra la condición física es buena. He estado bien físicamente todo el rato, otra cosa es que cuando uno tiene ansiedad la respiración se dispara. He estado rápido, he resistido bien y he estado capacitado para jugar puntos largos", argumentó.

Nadal resaltó como clave el momento de volver a ganar una cita importante, en el arranque de la gira de tierra europea. "Llevábamos tiempo esperando una victoria así y ahora es el momento de intentar centrarse en lo que viene", explicó. Tras su victoria en Montecarlo se acuerda del último año. "Ha sido un año complicado, en el que he sufrido más de lo habitual y no por perder, que al final perder es parte del deportista, pero a nivel mental había experimentado sensaciones extrañas para mí, había jugado con más ansiedad de lo que me hubiera gustado", afirmó. "Creo que se ha trabajado mucho para volver a tener sensaciones positivas, que las vengo sintiendo desde principio de año, pero necesitaba una victoria para confirmarlas. Creo que la victoria llega en un momento perfecto de la temporada porque es el primer gran torneo en tierra y lograr la victoria es algo muy importante", añadió.

Toni Nadal

Toni Nadal, tío y entrenador de Rafel, puso ayer toda su confianza en su pupilo después de ganar en Montecarlo, afirmando que "tiene el nivel para volver a ganar Roland Garros". "Rafel está a un nivel de juego para ser uno de los favoritos claros a la victoria. El máximo favorito será Novak Djokovic, pero el nivel demostrado por Rafel indica que puede ser un claro favorito, otra cosa es que las cosas se tuerzan en el camino", declaró en Radio Mallorca. "En cuanto a la reafirmación del juego y a la confianza que da, la victoria en Montecarlo es más que un título, porque Rafel ha conseguido volver a moverse de manera eléctrica como hacía tiempo que no lo hacíamos, mentalmente ha estado muy fuerte, ha sabido sobreponerse a las dificultades y ha dado un plus cuando los partidos lo han requerido", alegó el preparador.

El tío del tenista mostró su satisfacción, y aseguró que "el buen juego que tenía Rafel en los entrenos no se traducía en los torneos por una causa o por otra, ya sea por nervios, falta de confianza o intranquilidad, pero no acababa de rendir al cien por cien".