Demasiado líder para el Palma Futsal, aunque ayer se sacó la espina de la mala imagen ofrecida en la Copa de España y plantó cara al Movistar Inter en su pista. En un partido que se decidió en dos acciones concretas en el ecuador de la segunda mitad, los de Juanito cayeron por 6-3 en su visita al primer clasificado de la Primera División nacional.

El Palma Futsal, que sigue en la lucha por la tercera o la cuarta plaza a falta de cinco jornadas para el final de la fase regular, quería demostrar su nivel y sacarse la mala imagen del último enfrentamiento ante los madrileños. Lo consiguió el equipo mallorquín, pero no fue capaz de sorprender al Movistar Inter.

Fue un comienzo intenso, con alternativas para ambos equipos y muy vistoso. Los de Juanito salieron a la pista avisando al rival de sus intenciones y atacando, sin miedo. De hecho, el primer aviso fue de Joao, que ya obligó a actuar a Jesús Herrero nada más comenzar el partido.

Pero el Inter, que solo ha perdido un partido en su casa y es el favorito al título, no se dejó sorprender. La respuesta fueron las ocasiones previas al gol de Daniel. Apenas un minuto después, el Palma empató con una acción que culminó Vadillo.

Los de Juanito compitieron a buen nivel, pero el partido se les fue en momentos puntuales. En la primera parte, con dos goles en poco más de un minuto. Cardinal y Ortiz desequilibraban el partido con sendos tantos de estrategia.

Los palmesanos acusaron los dos goles y les costó recolocarse durante varios minutos, pero aguantaron el momento defendiendo bien. Juanito apostó por Vadillo como portero-jugador y la decisión le salió perfecta, ya que en la primera jugada Pizarro marcó el 3-2 antes del intermedio.

El Palma mejoró sus prestaciones tras el descanso y puso en apuros al líder. Los de Juanito pasaban por menos problemas que en el primera parte, ganando más terreno al rival. Sergio, tras varias ocasiones por bando, combinó con Joselito en la frontal y se sacó de encima a los defensores con un movimiento de cintura y batió a Jesús Herrero. El tanto daba credibilidad a la apuesta del Palma y metía en serios apuros a los locales. Pero de nuevo acusó la gran cantidad de faltas cometidas. Juanito apostó de nuevo por jugar con portero-jugador, en este caso Sergio. Esta vez no salió bien y en la primera combinación se perdió el balón ante la presion rival y Ortiz marcó a placer desde su pista y a puerta vacía. El Palma insistió con portero-jugador y un minuto después se repitió la acción.

Rivillos marcó el quinto y dejaba el partido cuesta arriba y con poco tiempo para la remontada, algo que fue imposible. Ya con el partido decidido y con el Palma a la desesperada, Ricardinho hizo el sexto gol que finiquitó el duelo.