Rafel Nadal ya está en las semifinales de Indian Wells, primer Masters 1.000 de la temporada. El mallorquín lo logró con una trabajada y convincente victoria sobre el tenista japonés Kei Nishikori, por 6-4 y 6-3 en una hora y 33 minutos. El manacorí se enfrentará hoy en las semifinales a Novak Djokovic (derrotó al francés Jo-Wilfried Tsonga por 7-6 y 7-6) en el que se será su duelo número 48 (gana el serbio por 24-23).

No fue un partido sencillo para el de Manacor, con 33 grados en el estadio 1 y ante unos 10.000 espectadores. Allí se encontró Nadal de primeras a un durísimo y velocísimo rival, que le hizo sufrir para salvar dos bolas de rotura en el primer juego.

La solidez y confianza del de Matsue, ejemplar con el saque y firme desde la línea de fondo buscando las esquinas con su látigo en la derecha, le llevó a lograr el break en el tercer juego y a anotarse el cuarto en blanco. Cometía el balear por entonces demasiados errores no forzados, pero fue gritar su primer "¡Vamos!" y envalentonarse, de forma que pasó de estar atrás 1-3 a ponerse por delante 4-3, ajustando mucho más sus golpes y mostrándose especialmente certero con su servicio.

Fueron momentos de un tenis brillante por parte del mallorquín, que se hizo con el primer set extrayendo de su zurda golpes a la altura de los de antaño y alargó ese estado de gracia en la segunda manga, perfecto empleando el revés y astuto en la red. Se colocó con un cómodo colchón (3-0) y ya no miró el retrovisor.

La enérgica y decidida versión de Nishikori al arranque del duelo se había disipado. Ni siquiera los ánimos de un ruidoso grupo de seguidores nipones lograron insuflar nuevos bríos al tenista, entregado a los autoritarios raquetazos de su contrincante. Los saques de Nadal salían con fuerza y precisión (88 % de acierto en el primer saque). Su colocación en la pista era la adecuada y su anticipación a los movimientos del japonés resultaba admirable. Nishikori reaccionó, firmó un break y puso el 4-3 en la segunda manga, pero cuando tuvo la oportunidad de empatar el choque, claudicó su saque y sirvió a su rival la victoria. Con este resultado, Nadal tiene una marca de 8-1 en sus enfrentamientos directos con Nishikori. La única derrota del manacorí se produjo en el último choque que disputaron (Masters 1000 de Montreal, 2015).

Busca su final número 100

El de Manacor busca la final número 100 de su carrera. Tres de sus 27 victorias en Masters 1.000 llegaron en el desierto californiano. Pero sólo ha podido estampar su firma en uno de los últimos 20 campeonatos de ese tipo.