Rafel Nadal se clasificó para los octavos de final del Masters 1.000 de Indian Wells (Estados Unidos), primero de la temporada, tras derrotar a su compatriota Fernando Verdasco en dos sets (6-0 y 7-6(9), en un partido que supuso la venganza del manacorí tras su temprano adiós en el Abierto de Australia de este año.

Nadal y Verdasco se han enfrentado 18 veces y Verdasco le ganó en tres. Curiosamente esas tres victorias llegaron en los cuatro últimos partidos. Una particular bestia negra que había impedido el despegue del mallorquín cuando más parecía dispuesto a volar. Este miércoles, Nadal apenas le dio opciones en el primer set, aunque sufrió en el segundo.

En el primer parcial estuvo demoledor, dejando en blanco al madrileño y conectando golpes prácticamente imposibles para Verdasco. Una primera manga muy limpia para el balear, que se topó con un rival mucho menos fiero que en los precedentes más recientes, pero sobre todo, mucho más desacertado en el servicio. Apenas superó el 50% en el primer saque, una cifra que disparó a Nadal hacia el segundo set.

Con el 6-0 endosado, el siguiente asalto fue totalmente diferente. Verdasco reaccionó y obligó al manacorí a mancharse en el barro. Desde el fondo de la pista recuperó un buen nivel para complicar el partido, sobre todo cuando Nadal se disponía a cerrarlo. Varias dobles faltas de Nadal, sumadas a la mejoría del zurdo capitalino, hicieron que el duelo se deshiciese en el 'tie-break'. Ahí renació Verdasco, que dispuso de hasta cinco bolas para llevarse el set. En la última, antes de que el servicio volviese al cuarto favorito del torneo, Fernando cometió doble falta y entregó a Nadal la liberación y el triunfo.

El mallorquín jugaba esta pasada madrugada por clasificarse para cuartos ante el alemán, de origen ruso, Alexander Zverev, con quien no se ha enfrentado nunca en su carrera. El germano eliminó al búlgaro Grigor Dimitrov en la ronda anterior y al francés Gilles Simon.

Nadal aseguró que logró "una victoria importante" y que el modo de conseguirla le ayudaba a nivel mental, al tiempo que advirtió que su siguiente rival, el alemán Mischa Zverev es un potencial número uno del mundo. "Es una victoria importante para mí. He logrado dos triunfos aquí, duros ambos. Eso es algo que permanece en mi cabeza y ayuda", admitió Nadal tras el partido.

El balear recordó que perdió "partidos similares" al que le midió a Verdasco "en Australia, Bueno Aires y Río de Janeiro". "Así que es importante ganar sets como el segundo para mí. Me sentí afortunado al ganar el 'tie-break' y al mismo tiempo creo que al final de él jugué bien, sin muchos errores y yendo a por los puntos", opinó.

Del alemán Zverev dijo: "Claramente un posible número uno del mundo". "Es un jugador sorprendente. Es alto, tiene buen servicio, tanto el primero como el segundo, y grandes golpes desde el fondo con el drive y el revés", afirmó. "Lo tiene todo para convertirse en una gran estrella y está jugando bien, ya ha ganado partidos aquí contra Dimitrov y Simon. Sé que va a ser un partido muy duro, pero estoy feliz por cómo jugué en el primer set".