Poco, muy poco, ha luchado y trabajado Joan Llabata como presidente de la Federació Balear de Trot (FBT) para erradicar el dopaje de los caballos en las carreras de las islas bajo el efecto tampón que permite la administración de substancias como el bicarbonato sódico o similares. En la mayoría de ocasiones suministrados directamente al estómago del animal vía sondas nasogástricas. Un dopaje que en los principales hipódromos de Francia -Vincennes, Enghien y Cagnes sur Mer- se persigue con nuevo métodos, diferentes a los habituales y análisis diferenciados. Un tema que, sin embargo, no parece despertar la atención de Llabata, ni tampoco el interés de su 'hombre para todo', el director técnico Rafel Manera.
Medidas de urgencia
Como medidas urgentes a adoptar por el nuevo presidente del Institut de l'Esport Hípic, Joan Font, sería recomendable el mantenerse lo más lejos posible de los intereses particulares de Joan Llabata y sus principales colaboradores en la junta directiva de la FBT. También poner fin al fracasado horario matinal de las reuniones del Hipòdrom de Manacor ideado por Jaume Ramis, así como dejar sin efecto ya hoy la 'peligrosa para la salud animal' declaración de intenciones de llevarse el 'Gran Premi d'Egües' "de mayo a noviembre o diciembre".
Semanas tristes
En las últimas semanas varias familias del trote mallorquín se han visto afectadas por pérdidas personales. Ese es el caso de Toni Bauzá, hermano de Rafel de Son Espases, tras el fallecimiento repentino de su esposa. También de la saga Pocoví-Sallens, con la muerte del 'padrí Toni'. O de la pérdida del inolvidable Biel Fons, más conocido en Manacor por 'Vaia Vaia'. La primera gran biblia humana del trote francés que en la isla se puso a disposición de todos los que nos interesamos por sus leyendas y avances.
