El entrenador del Valencia, Gary Neville, ha admitido que el 7-0 en contra cosechado por su equipo en la ida de la semifinal de la Copa del Rey ante el Barcelona es "inaceptable", aunque ha respondido repetidamente que no piensa dimitir.

En todo caso, el técnico inglés ha querido enviar un mensaje positivo para "centrarse únicamente" en el decisivo partido liguero ante el Betis.

"Cuando se producen momentos como estos no los disfrutas. Es doloroso. Estábamos sintiéndome totalmente indefenso contra un rival fantástico y este resultado es inaceptable. Tengo que estar de acuerdo que ha sido una noche dolorosa", ha dicho en la rueda de prensa posterior al partido disputado en el Camp Nou.

El preparador inglés ha sido preguntado hasta en tres ocasiones por si ve peligrar su puesto en el Valencia. En la primera de ellas ha respondido con un lacónico "no" y en las otras dos ha preferido optar por no responder: "Siguiente pregunta".

"Hay que sido crítico con el juego y con el rendimiento del equipo, ha sido un juego muy pobre y hemos regalado la bola en zonas peligrosas. Esta noche hemos dado un paso atrás importante", ha dicho el técnico, quien ha alabado la calidad del tridente atacante del Barça: "Es el mejor del mundo".

"Ha sido la noche más triste. Lo siento muchísimo por los aficionados de Valencia. Esta noche han sufrido y es lo que más me duele. Mi objetivo es tener una plantilla lista para entrenar y ganar al Betis", ha insistido.

Preguntado por el motivo por el cual su equipo no ha presionado muy arriba al Barça, como hicieron Athlétic y Atlético en los últimos partidos, Neville ha dicho que ha calcado el planteamiento que hizo en su día ante el Real Madrid.

"Unos equipos han presionado arriba, otros hacen lo contrario. Hemos hecho lo mismo que hicimos contra el Madrid. La ejecución ha sido distinta", ha dicho.

Preguntado sobre la reacción del público cuando salió a calentar Denis Cheryshev, Neville ha comentado que en ningún caso pensaba que el público se estuviera riendo del delantero.