Xavi Sastre vivió su primer partido en el banquillo del Pama Air Europa con mucha tensión y pasión. El entrenador mallorquín no paró en todo el partido de dar instrucciones a sus jugadores y animar.

Tras su estreno aseguró que le gusta ser "agresivo" en la banda para transmitir intensidad a sus jugadores y, en ese sentido, está satisfecho por haberlo logrado en gran parte del encuentro. "Me he sentido bien, no he cambiado en nada. Me gusta ser muy agresivo en el banquillo porque intento transmitir esto a los jugadores y estoy convencido de que no conseguiré esto sólo treinta minutos, sino cuarenta. Cuando esto suceda conseguiremos victorias", explica el técnico.

En el primer partido de Sastre ya se han visto los primeros cambios en cuanto al estilo de juego se refiere. Con la directriz clara de correr, el Palma le complicó mucho la vida al Melilla en la primera mitad, pero los de Alejandro Alcoba frenaron el ritmo de los isleños y, en la segunda mitad, el Air Europa no fue capaz de anotar con claridad en el juego en estático, a pesar de que lograron varios tiros liberados.

"Hemos sido, no diría más agresivos, pero sí que hemos estado más implicados en el juego. No hemos sido tan ordenados y hemos corrido más porque tenían esta orden. Hemos dejado de correr cuando ellos no nos han dejado", explica Sastre de cómo fue su Palma Air Europa en el día del debut.

Partido con buenas sensaciones, pero con el regusto amargo de no ganar. El Palma encadena tres derrotas consecutivas y seis en los últimos ocho encuentros, una situación complicada que el equipo tratará de resolver dentro de quince días.

El parón por la Copa Princesa del próximo fin de semana vendrá bien a un equipo que ha caído hasta la quinta posición de la LEB Oro, por detrás del Peña Huesca y del Burgos, y que tendrá dos semanas, antes del próximo choque ante el Leyma Coruña, para seguir asimilando los nuevos conceptos y cambios que quiere proponer Xavi Sastre.

Edu Durán pasa por el quirófano

Por otro lado, el escolta Edu Durán pasará hoy lunes por el quirófano para ser intervenido de la fractura nasal sufrida el pasado martes en un entrenamiento.

El madrileño pudo jugar el pasado sábado ante el Melilla sin máscara protectora porque le incomodaba, y tras la operación se espera que esté diez días de baja, por lo que estaría en el próximo encuentro, el día 4 de febrero en A Coruña.