Los dos primeros de la Premier League, Leicester y Arsenal, cayeron en sus visitas a Anfield ante el Liverpool (1-0) y Southampton (4-0) este sábado en la jornada de 'Boxing Day', decimoctava de la Liga inglesa, en la que el Chelsea siguió con su crisis ya con Guus Hiddink en el banquillo, el futuro de Van Gaal continúa en el aire tras su derrota contra el Stoke City y el 'City' celebró la fiesta con una goleada.

El Arsenal, rival del Barcelona en la Liga de Campeones, fue volteado y no encontró nunca la forma de afrontar la defensa del Southampton de Ronald Koeman, que llevaba seis jornadas sin ganar, pero que este sábado goleó con un latigazo con el exterior del jugador de Curazao Rhuendly 'Cuco' Martina en el minuto 19, y un doblete de Long y un testarazo de Fonte en un córner, en la segunda parte.

Los de Arsene Wenger, con una versión muy gris y en el que los centrales se vieron superados por Long, desaprovecharon así la derrota previa en Anfield del Leicester contra el Liverpool de Jürgen Klopp, que consiguió tres puntos que le acercan a puestos de Europa League gracias al solitario tanto de Benteke en la segunda parte, pero que deja aún como líder a su rival.

El partido siguió el guion esperado, con un Liverpool dominador que jugaba cerca de la portería defendida por Schmeichel y un Leicester, que fiel a su filosofía, intentaba aprovechar el error de su rival. A pesar del dominio 'red' fue Mahrez quien disfrutó de la ocasión más clara de la primera parte. No obstante, fue Benteke, que salió sustituyendo al lesionado Origi, quien logró ver puerta.

El 'Boxing Day' deparó una sorpresa en su primer encuentro este sábado con una nueva derrota (2-0) del Manchester United, que estuvo lejos de la reacción en su visita al Britannia Stadium del Stoke City que esperaba un Louis van Gaal muy criticado y señalado, acumulando tres derrotas y cinco jornadas sin ganar en Premier League.

Con la del Wolfsburgo en Liga de Campeones, son cuatro las derrotas seguidas del United y el maratón navideño puede llevarse por delante al holandés. El cuadro de Van Gaal, quien en la previa pidió respeto a la prensa por las noticias de su inminente despido, volvió a ofrecer una pobre versión que sufrió además los golpes de un inspirado Stoke que en casa ya se cobró otras víctimas ilustres como Chelsea y Manchester City.

El conjunto rojiblanco golpeó la apatía de un United sin fútbol ni actitud durante la primera mitad. Bojan, tras un grave error de Memphis, y Arnautovic con un tremendo 'misil', torcieron más aún el gesto de Van Gaal en 26 minutos. El intento de reacción visitante no llegó hasta la segunda mitad con la entrada de Rooney. Con él creció el United aunque el hombre más destacado, más protagonista, en los 'red devils' siguió siendo un inesperado Fellaini.

En sus botas pudo estar el momento clave, con un remate a bocajarro que despejó el meta Butland a la hora de encuentro. Martial y Mata tuvieron ocasiones al final, en el intento fallido de los de Manchester, del mismo modo que el Stoke pudo sentenciar a la contra. No levanta cabeza un United cada vez más lejos de la cabeza y que se medirá en dos días con el Chelsea, para cerrar un maratón navideño, con Van Gaal en el aire.

Por su parte, el Chelsea tuvo que conformarse con el empate ante el Watford en un partido en el que no dio muestras de mucha mejora tras la salida de Jose Mourinho. Comenzaba una nueva andadura con Guus Hiddink al frente pero no mejoró mucho la imagen mostrada ante el equipo de Quique Sánchez Flores, que fue mejor en el global del encuentro. Solo el acierto de Diego Costa de cara a puerta mantuvo con vida a los 'blue'.

Deeney e Ighalo, secundados por Jurado en el equipo visitante, consiguieron remontar al inicio de la segunda parte el primer tanto del hispano-brasileño. El único error del Watford fue la incapacidad para cerrar el encuentro y pudieron pagarlo caro. Diego Costa empató el encuentro en una jugada discutida que pudo haber empezado con una falta en contra que no señaló el colegiado. Eden Hazard, que salió mediada la segunda mitad, mejoró el juego poco continuado de su equipo y puso en bandeja el 3-2 pero Oscar, con un inesperado tropezón desde los once metros, no lo hizo realidad y el encuentro terminó con empate a dos.

En el Etihad, el Manchester City no dio opción al Sunderland, al que goleó sin piedad, y cerró el partido en nueve minutos para afianzarse, más si cabe, en la tercera posición de la clasificación. Los goles de Sterling, Yayá Touré y Wilfred Bony en los primeros 20 minutos, y el de Kevin de Bruyne en la segunda mitad cerraron la goleada navideña del equipo de Manuel Pellegrini ante su afición. Solo el tanto de Borini maquilló el resultado para los rojiblancos.

En White Hart Lane, el papel sobresaliente de Harry Kane en la primera parte, en la que forzó un penalti y marcó dos goles fue suficiente para dejar los tres puntos en casa y meter al Tottenham en puestos de Liga de Campeones, en un partido en el que los de Mauricio Pocchetino fueron de menos a más y terminaron por anular a su rival. Thomas Carroll cerró la goleada a diez minutos del final.

Poca historia tuvo el partido disputado en el Liberty Stadium, ya que el tempranero tanto del surcoreano Sung-Yong Ki, sirvió para que el Swansea ganara el partido ante un voluntarioso West Brom que puso en evidencia los problemas de gol que arrastra esta temporada.

Menos que en el Liberty Stadium, sucedió en Dean Court, donde el partido terminó con las tablas iniciales entre el Bournemouth y el Crystal Palace, en un partido muy plano, con muchas interrupciones y errores donde las ocasiones brillaron por su ausencia.

Cerca de conseguir la única victoria visitante estuvo el West Ham ante el Aston Villa. El gol de Aaron Cresswell en el descuento del primer tiempo hacía justicia a lo visto en el verde, pero Jordan Ayew desde el punto de penalti puso las tablas con las que finalizó el partido.