Rafel Nadal buscará a partir de las 15 horas (C+Deportes2, Dial 56) dar un paso prácticamente definitivo para clasificarse para las semifinales de las ATP World Tour Finals, la cita que reúne hasta el próximo domingo a los ocho mejores tenistas del año en el O2 Arena de Londres. Será una auténtica prueba de fuego porque delante tendrá al escocés Andy Murray, que aspira a finalizar el año como número 2 del mundo por primera vez en su carrera.

Tanto Nadal como Murray son conscientes de que una victoria hoy les deja prácticamente en semifinales y con muchas opciones de ser el primer de su grupo, el Ilie Nastase. No es un dato menor porque el quedar primero implica que, casi con toda probabilidad, evitas a Novak Djokovic en las semifinales. Si todo transcurre con un mínimo de lógica, el suizo Roger Federer acabará segundo de su grupo, el Stan Smith.

Nadal llega al partido con moral tras su contundente victoria el lunes ante el suizo Stan Wawrinka (6/3, 6/2). Pese a la indolencia de su rival, que se fue mentalmente en muchos momentos del partido, lo cierto es que el nivel del manacorí fue alto. Dejó claro que su tenis va al alza en este final de 2015. Aunque las condiciones de la pista no sean las ideales, parece preparado para presentar batalla a Murray.

El escocés llega a la cita de esta tarde tras imponerse por un doble 6-4 a David Ferrer, mostrando un tenis muy agresivo sobre todo en el resto.

Será la vigesimosegunda vez que Nadal y el tenista de Dunblane se vean las caras, con un balance favorable para el campeón de catorce grandes por 15-6. En este 2015 solo se han enfrentado una vez. Fue en la final del Masters 1.000 de Madrid, sobre tierra, con triunfo de Murray por 6/3, 6/2, en su único triunfo sobre el mallorquín sobre superficie de arcilla. En pista rápida, la ventaja es para el escocés, aunque Nadal ya sabe lo que es ganarle en este tipo de superficie.

Lo cierto es que el partido supone para Nadal un examen de altura y saber hasta qué punto su recuperación, evidente, le basta para competir contra uno de los tres mejores del ránking. Una victoria sobre Murray, que tiene la mente puesta en la final de la Copa Davis que la próxima semana debe disputar contra Bélgica, sería un golpe de moral importante para el mallorquín, necesitado de triunfos de prestigio y que le permitan dar este paso para convencerse de que su vuelta entre los mejores está ya muy cerca.

Nadal expresó sus sensaciones positivas tras su victoria ante Wawrinka. "Hice un partido muy sólido. Tuve un juego malo, que fue el primero, pero luego estuve muy bien. He tenido una buena semana de entrenamientos aquí y fui agresivo, lo hice como lo quería hacer, sin cometer muchos errores. El único pero es que puedo mejorar mi servicio", dijo Nadal en la rueda de prensa posterior al encuentro, que recoge Efe. "Estoy trabajando bien y estoy contento por la forma en la que estoy compitiendo en los últimos dos o tres meses. Es importante seguir así", destacó Nadal.

Respecto al partido ante Murray dijo: "Es una buena oportunidad para competir contra el número dos del mundo, un jugador que ha tenido una gran temporada y que juega muy bien en todas las superficies, sobre todo en esta. Intentaré hacer un buen partido y llevarme la victoria", comentó.

Cuestionado sobre si es uno de los favoritos para llevarse el título, recalcó que solo ha ganado el primer encuentro y que el Masters "es el torneo más difícil del año".

A las 21.00 horas será el turno de David Ferrer y Stanislas Wawrinka, que se verán las caras en busca de no encajar una derrota que les deje prácticamente al borde del abismo.