El piloto mallorquín Kike Ferrer (EMS Competición-Kawasaki), se coronó ayer como el campeón de España de Velocidad más joven de la categoría de 1.000cc (Superstock1000), desde que se incorporaran al Campeonato en el año 2002 este tipo de motores, denominada entonces categoría Fórmula Extrem en el antiguo formato del CEV. En una carrera conservadora, Ferrer se hizo con una quinta posición que le fue suficiente para alzarse con el título nacional. La carrera se disputó a solo 7 vueltas tras sacar dirección de carrera bandera roja por una caída de varios pilotos.