La selecciones sub 21 de España y Suecia firmaron un empate en el tercer partido de clasificación para el Campeonato de Europa de la categoría, condicionado por la expulsión de Sául Iñíguez, jugador del Atlético de Madrid, en el comienzo de la segunda parte. Marco Asensió jugó de inicio y fue sustituido en el minuto 54. Los españoles se adelantaron en el marcador con un gol de Óliver y dominaron la primera parte, mientras que el combinado sueco aprovechó la superioridad numérica durante los segundos 45 minutos para sacar un punto en el estadio tinerfeño.

Cuando todavía había aficionados ocupando sus asientos en el graderío, España ya había creado la primera ocasión clara de gol. Marco Asensio puso en juego un saque de esquina que, libre de marca, remató contundentemente Saúl, pero su testarazo se estrelló en el larguero de Cajtoft.

España pudo ampliar la ventaja antes del descanso, pero el portero sueco desbarató las ocasiones de Munir, que remató tras un pase de Asensio, y Gerard Deulofeu, quien lo intentó con un lanzamiento de falta. El devenir del encuentro cambió radicalmente en el comienzo de la segunda parte, después de que el árbitro alemán Daniel Siebert expulsase por doble amonestación a Saúl, que era unos de los futbolistas más destacados del choque.

A raíz de la expulsión llegaron los mejores minutos de los visitantes, que obligaron a Kepa a emplearse a fondo para evitar que dos disparos de Hallberg se colasen en su portería.

De esta forma, el empate cosechado ayer coloca a la selección en el tercer puesto de su grupo, invicta todavía y con siete puntos, los mismos que Suecia. El grupo lo lidera Croacia, que ya suma nueve puntos en tres partidos.