Nico López entró en el selecto club de los técnicos que llevan cien partidos como entrenador en Segunda B el pasado domingo, en el partido que enfrentaba a su actual equipo, el Llosetense, al Huracán Valencia.
Desgraciadamente para el entrenador mallorquín, tuvo que celebrar la efemérides con una derrota en casa.
Pese a ser junto con Miguel Álvarez (Sabadell) los técnicos más veteranos de la categoría, las circunstancias deportivas han llevado al preparador mallorquín por otros derroteros, pese a que su primer partido en Segunda B data del 31 agosto de 1997, cuando el Sóller se impuso en el estadio 'Comunal' del Principado al Andorra por 0-3.
Desde entonces, tras consumarse la pérdida de categoría del conjunto de la Vall -con el que estuvo las 38 jornadas de Liga-, su trayectoria ha estado siempre adscrita a la Tercera División Balear.
Fue el Atlético Baleares el club que lo rescató para la causa -la categoría nacional- en el verano de 2013. Con los blanquiazules estuvo 59 partidos como máximo responsable técnico.
Más de una temporada y media hasta que el propietario del club, el alemán Ingo Volckman, decidió prescindir de sus servicios el 18 de enero de 2014 tras perder el conjunto palmesano por 1-0 frente al Olímpic de Xàtiva.
Por lo demás, este 'centenario' no deja de ser una justa rúbrica para un técnico que lleva 27 años consecutivos entrenando, que ha disputado diez liguillas de ascenso a Segunda B con equipos como el Poblense y el Constancia, y que acumula más de 700 partidos como sufridor de la 'silla eléctrica' de los banquillos.
Con el Llosetense, que se estrena esta temporada en la categoría, ya ha cumplido tres partidos oficiales en Liga. Las sumas no engañan. Ya está en el club de los entrenadores que han dirigido 100 encuentros en la Segunda B.
