Carlos Rodríguez, con un 'hat trick', y el Atlético Baleares en conjunto desarbolaron en una segunda parte primorosa a un Cornellà que no vino a cerrarse, buscó el marco contrario, y se encontró con un severo correctivo. Un 'set' durísimo para los barceloneses y balsámico para un Atlético Baleares que parece que al fin ha dado con la tecla, al menos en casa, ya que la de ayer es su segunda victoria de la temporada en Son Malferit.
A pesar del marcador final, ni mucho menos fue fácil la misión para los de Nico López. Pese al buen arranque blanquiazul -marcó Artabe a la salida de un corner forzado por Fullana en el minuto 4-, el Cornellà ni mucho menos perdió el paso. De hecho, dos minutos después, en la primera acción de real peligro sobre el marco de Víctor, el balón colgado por la derecha por Joel fue cabeceado por Àlex Gallar al fondo de las mallas. Con el 1-1 en el marcador, el Baleares vio cómo los visitantes comenzaban a ganarle la partida en la zona medular.
Los blanquiazules buscaban de nuevo el marco de Segovia con más voluntad que clarividencia y el 'tempo' del partido lo marcaba el once de Jordi Roger. Un Cornellà que de nuevo volvió a marcar, gracias a una jugada de pizarra justo cuando más arreciaba la lluvia. Y lo hizo sacándole Sergi Gómez los colores a la zaga blanquiazul con su remate con la testa en el segundo palo.
Con 1-2 en contra, el partido se le puso ideal a los barceloneses, que al contragolpe buscaban cerrar el partido. A la media hora de partido Sergi Gómez tuvo la opción de colocar el tercer gol en el casillero visitante pero se encontró con la seguridad de Víctor.
Y cuando peor lo estaba pasando el cuadro blanquiazul, un hachazo en la zona medular del armario verdiblanco Borja le supuso su segunda tarjeta, dejando al Cornellà con diez. Una bocanada de aire fresco que agradeció en grado sumo el Atlético Baleares. Tres minutos después llegó el empate, devolviendo la tranquilidad al once blanquiazul y de paso acobardar más al técnico del Cornellà, Jordi Roger, que automáticamente colocó a otro central, Pelegrí, para evitar males mayores.
Tras el intermedio, arreón inicial blanquiazul y reacción del Cornellà, comandado por un notable Sergi Gómez. Puro espejismo. Otra pifia en defensa de los verdiblancos habilitó a Carlos Rodríguez. Con el 3-2, el Cornellà comenzó a descoserse. Lo vio el Baleares y una acción entre Guasp y Fullana acabó con un remate a gol de Carlos Rodríguez (4-2).
Entró en el Cornellà el mallorquín Toni Trujillo, pero la suerte ya estaba echada para los de Nico López, con Carlos Rodríguez y Chando Torres que ponían el 'set' a un Cornellà desintegrado.
