—¿Cómo se siente tras ganar su primera Copa del Rey de vela?

—Muy contento, porque me ha costado mucho tiempo y trabajo conseguir mi primera Copa.

—¿Cuántas ediciones ha disputado antes de conseguirlo?

—He necesitado disputar unas 20 ediciones para ganarla.

—¿Habrá sido un triunfo muy especial para usted?

—Sí, nos ha costado mucho tiempo, pero al final lo hemos conseguido y estamos muy orgullosos. Ganar la Copa del Rey tiene un valor especial, porque se disputa en casa. Es muy especial para mí.

—Dicen que es usted un visionario y utilizó una estrategia rompedora para ganar el trofeo.¿Cómo lo hizo?

—¿Un visionario? No creo en los visionarios. Es cierto que navegamos muy bien toda la semana, a pesar de tener un barco que no era muy rápido, y supimos sacarle el máximo rendimiento. Nos supimos aprovechar de los errores de los rivales para ganar la última manga, la decisiva.

—¿Se podría decir que es usted el Leo Messi de la vela mallorquina?

—La comparación es un poco rara. Yo no soy tan mediático. Aún así no me puedo quejar de la trayectoria que llevo.

—Presenta un palmarés envidiable en el mundo de la vela.

—Si, todavía me falta un trofeo por ganar que es la Volvo Ocean Race. Hay tres títulos que son las Olimpiadas, la Volvo y la Copa América que son la Triple Corona. Este año me queda la espina clavada de la Volvo Ocean Race. Van pasando los años y en las dos últimas ediciones no lo hemos conseguido. A ver si volvemos a tener una oportunidad para intentar conquistarla.

—Hablando de la Volvo Ocean Race, ¿tuvo mala suerte en la última edición?

—Sí. Es un poco de mala suerte romper dos timones, porque son dos piezas del barco que nunca esperas que se rompan. Por lo demás, había gente muy buena y fueron mejores que nosotros.

—¿Cuándo intentará alzarse con el último trofeo que le falta de la Triple Corona?

—De momento hace dos semanas que regresé a casa y quiero descansar un poco, cumplir el programa de regatas que tenemos ahora y con calma plantearme la próxima edición de la Volvo.

—En unos días se cumplirán 20 años de la conquista de su oro olímpico. ¿Cómo lo recuerda?

—Por una parte lo recuerdo muy lejano. Es un de los grandes éxitos de mi carrera. No puedes disputarlo muchas veces. Es cada cuatro años y la verdad es que tuve la oportunidad no sólo de participar sino de ganarla. Competir es muy importante y si encima te llevas el oro a casa, te puedes imaginar.

—¿El oro de Barcelona 92 es su mayor éxito conseguido?

—Es el éxito por el que socialmente más se me recuerda y más trascendencia tiene, pero también están los campeonatos del mundo que he conseguido, la Copa América. Son triunfos de los que guardo muy buen recuerdo y muy importantes para mí.

—Después de usted no ha aparecido nadie de las islas que esté triunfando en el mar¿Qué le pasa a la vela balear, que nadie le ha cogido el relevo?

—La vela balear está muy bien tratada, porque tienen entrenadores y ayudas para que funcione, pero que después haya triunfos o la suerte de poder ganar no es una cuestión de ayudas. Hay que tener paciencia, trabajar y seguro que saldrán más campeones .

—¿Cree que este año España en los Juegos Olímpicos puede volver a ganar un oro en vela, de la mano de campeones como Iker Martínez y Xabi Fernández?

—Ellos siempre son candidatos. Pero también tenemos opciones en las tablas y en el 470. Creo que España tiene opciones de éxito en varias categorías de la vela.

—Mientras usted sigue a lo suyo, ¿cuál es su próximo reto?

—Mi reto ahora mismo es entrenar y cumplir con el calendario. La verdad es que quiero seguir teniendo la suerte de poder vivir de lo que me gusta. Y bueno, como objetivo me queda la Volvo Ocean Race, pero para eso se necesita un buen proyecto y no es fácil. Tienes que tener suerte y esperamos tenerla y poder ganar esa competición algún día.

—¿Qué es lo que más echa de menos cuando está lejos de Mallorca, compitiendo?

—La familia.

—¿Y en regatas como la Vuelta al Mundo cómo lleva estar tanto tiempo lejos de la familia?¿Y la familia de usted?

—Saben que siempre viajo mucho y que es normal que estemos tiempo sin poder vernos. A veces se hace duro. Nos echamos mucho de menos, evidentemente. Me han conocido así. Mi pasión es el mar y creo que lo compaginamos muy bien. Sin su apoyo no podría hacerlo.