Una salida fulgurante del Mallorca B tras el descanso, en la que en apenas cinco minutos marcó tres goles, le permitió doblegar al Andorra, que hacía cinco partidos que no perdía, y sumar tres puntos que rompen una dinámica negativa del filial, que hacía tres jornadas que no ganaba.

La primera mitad, con el viento como principal protagonista, tuvo alternancias en el dominio de juego, pero ni el Mallorca B, ni el Andorra, dispusieron de claras ocasiones de gol. En el minuto 21 llegó el primer remate a puerta, Fue el local Aridai el que probó fortuna. Luego lo intentó Xisco, pero ambas acciones se fueron por encima del larguero. Los jugadores de Gori Silva respondieron con un remate de Gil de cabeza que Pablo envió a córner con Yeray ya superado. Al filo del descanso Vicente Pascual tuvo el gol en sus botas pero el balón salió rozando la cruceta.

Tras el descanso, la salida eléctrica de los hombres de Miquel Soler dejaron sentenciado el partido a los cinco minutos de la reanudación. Un periodo de tiempo en el que los rojillos pudieron marcar más goles, aunque cueste creerlo. El filial salió como un obús y los aragoneses, con el viento en contra, estaban parados. Abdón en el primer minuto remataba a la red un saque de esquina de Xisco. El 2-0 llegó tras un error de la defesa visitante que aprovechó el ariete mallorquín. Un minuto después Xisco de tiro cruzado superaba la estirada de Miguelez. El duelo quedó sentenciado, y eso que restaban 40 minutos por disputar. Didac estableció luego el 4–0 definitivo y el filial se relajó. El Andorra buscó maquillar el resultado pero no pudo hacer ni eso.