Joaquín Caparrós lanzó ayer un claro mensaje a su equipo: hay que ser constantes durante los noventa minutos que dura el partido. El preparador mallorquinista tiene bien frescas en la memoria las derrotas ante el Sporting y el Granada después de ir por delante en el marcador y con los partidos teóricamente controlados.

"Somos conscientes de que hay que romper la racha y entrar en una dinámica de resultados positiva. Estamos con una buena predisposición, como siempre, pero eso hay que trasladarlo noventa minutos. No vale hacer treinta, cuarenta o cincuenta buenos si luego tenemos una laguna porque al final te pasa factura. Hay que jugar un partido equilibrado durante todas las fases del choque", reclamó el técnico.

"Un encuentro empieza cuando pita el árbitro y acaba al final. El equipo que juega bien sabe competir, y eso incluye hasta los minutos que estamos en el descanso. En ese momento está recuperándose, visualiza fases del partido. Sabiendo que delante habrá un rival muy bien organizado, tenemos que tener paciencia y confianza. Claro que, ¿cómo se puede pedir confianza si no henos ganado? Hay que salir con predisposición al terreno de juego", añadió Caparrós.

En cualquier caso, negó que empiece a haber miedo en el vestuario por el hecho de sumar seis partidos sin ganar. "No hay ese temor, pero sabemos que hay mucha igualdad y cada partido que pasa sin resultados positivos nos puede entrar ansiedad y eso no es bueno. Pero vamos a ser optimistas y confiar en que todo salga bien. Todo pasa porque juguemos noventa minutos a un mismo nivel, no vale solo una fase", destacó el técnico andaluz.

A nivel personal, pocas veces Caparrós había estado sentado en un banquillo tanto tiempo sin conocer la victoria. "Las situaciones negativas y positivas las llevo igual porque me apasiona esta profesión y soy muy exigente conmigo mismo. La máxima presión me la pongo yo, siempre pienso en lo que he podido hacer mal. Pero no culpo a la mala suerte, eso no vale. Cuado se gana es porque se ha hecho algo mejor que el rival", indicó Caparrós.

El técnico andaluz insistió en mantener la concentración durante todo el encuentro. "Hay fases del partido que sabemos a lo que jugamos. En Granada sabíamos lo que teníamos que hacer, pero en un abrir y cerrar de ojos nos hacen dos goles. Eso no se puede hacer, ahí sí que tenemos que aprender a manejar esas situaciones", subrayó el preparador bermellón.