­El Logitravel cedió ante el Palencia. El equipo que dirige Xavi Sastre sucumbió ante un rival que vio el aro enorme, firmando una tarjeta de tiros de campo por encima del 50 por ciento. El equipo mallorquín pagó el esfuerzo de moverse a remolque gran parte del encuentro y llegó a estar con 14 puntos de desventaja. Y el Logitravel sumó así su cuarta derrota consecutiva en la Liga.

La salida del Logitravel Mallorca, con un 8-2, dejó claras las intenciones locales. Con mucho esmero en el rebote defensivo, pero que se fue diluyendo ante un Palencia que impuso su ritmo. Defensivamente Lezkano incomodó al cuadro naranja con una presión constante. En ataque las penetraciones de Bravo y el alimento a Moss permitían dar la vuelta al asunto y tomar la delantera, 13-16.

El Logitravel, sin acierto desde el perímetro, empezó a verse con tiros interiores muy forzados y sin premio. Tras la reanudación el Mallorca salió a por el Palencia con otra andanada 5-0 para recobrar la que sería su última ventaja, 24-22.

El conjunto castellano sacó la artillería para mantener un período de intercambio de golpes en el que Amador se convirtió en el baluarte naranja y Swanston empezaba a mostrar sus habilidades. El nivel de acierto palentino seguía sin decaer ante un Mallorca que ya empezaba a flaquear en rebote, concediendo segundas opciones. El conjunto de Xavi Sastre se movía en distancias cortas, pero a remolque, cerrando el segundo acto con 42-46.

De salida las faltas le jugaban una mala pasada al Logitravel que de una tacada veía como Amador y Whippy se metían con tres. Acto seguido la artillería visitante, con tres triples, elevaba la renta a 12 puntos (52-64) con quince minutos por delante. Un nuevo triple de Xavier metía al Palencia con 14 de ventaja y la guerra se iba al perímetro, donde el Logitravel se recuperaba para llegar con 11 de desventaja al cuarto definitivo.

El Mallorca rearmó su defensa y, con un parcial de 6-0 en dos minutos, lanzó una seria advertencia (72-77), que Nacho Lezkano cortó con un tiempo muerto. La respuesta con un 0-6 colocaba con 12 de ventaja a los visitantes.

Sastre se la jugó sin pívots y con cinco abiertos para volver a apretar el marcador (78-84). El Palencia seguía fino en el tiro y Mena le dio aire ante un Mallorca que no tiró la toalla ni tras la rigurosa técnica arbitral a Sastre. La pareja de turno tuvo su minuto de gloria y se ensañó con el Logitravel, neutralizado. El Palencia selló su victoria con un gesto de escasa elegancia de Lezkano, con un tiempo muerto a 4 segundos y el marcador definitivo de 86-96.