El centrocampista azulgrana Cesc Fàbregas sufrió ayer una rotura fibrilar durante el último entrenamiento del equipo y deberá permanecer unas tres semanas de baja, según informó el club catalán. La lesión de Fàbregas es en el tercio distal del bíceps femoral de la pierna derecha. Por este motivo, el exjugador del Arsenal se añade a la lista de lesionados de Pep Guardiola en este inicio de campeonato: Iniesta, Afellay y Alexis. Con vistas al encuentro de esta noche ante el Sporting de Gijón, Guardiola ha convocado a dieciocho futbolistas, entre ellos Puyol, recuperado de una contusión intercostal sufrida en el último partido de la Champions, y el joven del filial Isaac Cuenca.

Guardiola defendió el trabajo de Manolo Preciado, entrenador del Sporting de Gijón, colista de Primera, y aseguró que "no lo echarán", porque "si alguien ha hecho cosas por el Sporting es él". A Guardiola le recordaron que en su primera temporada como técnico del Barça, su equipo llegó a El Molinón con un punto en dos partidos, instalado en la parte baja de la clasificación, y entonces Preciado le apoyó. "Preciado llevó al Sporting a Primera y siempre ha resuelto situaciones difíciles. En el primer año, después de cuatro derrotas seguidas, todos dijeron que ya estaba descendido y el equipo se salvó", recordó.

La baja de Cesc es un contratiempo para el equipo. "Cesc te ayuda a jugar con 3-4-3 porque es diferente, pero también podemos jugar así sin él. Cesc es un jugador muy especial y es un contratiempo perderlo", señaló Guardiola.