El tenista español y número uno del mundo, Rafael Nadal, declaró en el día previo a debutar en el All England Club, que se despierta todos los días con la "ilusión" de ser "mejor jugador que el día anterior", al mismo tiempo que afirmó que es "imposible" repetir los éxitos del año pasado en los que ganó los Grand Slams de Roland Garros, Wimbledon y US Open.

"Creo que soy un jugador más completo que hace unos años. Estoy seguro de eso, pero ser un mejor jugador no significa que vaya a ganar más. No sé si ganaré más que hace unos años, porque ganar o perder depende de diferentes factores y de pequeños detalles. Creo que dar lo mejor de mí todos los días mejora mi tenis. Me despierto todos los días con la ilusión de ser mejor jugador que el día anterior", comentó el manacorí en la rueda de prensa previa al inicio de Wimbledon.

Nadal, que debuta hoy (14:00 horas) ante Michael Russell en el primer turno en la pista central del All England Tennis Club de Londres, ensalzó el trabajo del año pasado calificando de "imposible" el repetirlo. "El año pasado fue, en mi opinión, imposible de repetir", se sinceró.

El bicampeón de Wimbledon (2008 y 2010) reconoció que el principal problema de jugar en hierba es hacerlo frente a un "gran, gran sacador" porque el ritmo es "demasiado rápido", ya que en muchos juegos no se llega a tocar la bola.

En cambio, si se enfrenta a un jugador "normal" contra el que se puede "devolver la bola", el ritmo es "fantástico de ver y de jugar" porque permite muchas variantes del juego: "cortar, subir a la red y jugar agresivo. Si juegas demasiado defensivo es imposible jugar aquí. Tienes diferentes maneras de hacerlo, y eso me encanta".

Sobre su adaptación a la hierba, Rafa Nadal aclaró que la superficie "ayuda" a subir a la red, algo que no supone un problema para él. "No tengo la volea de Roger, eso seguro. Pero creo que soy rápido y mis movimientos son lo suficientemente buenos para ir a la red. Creo que tengo suficiente experiencia y buenas voleas para hacerlo", apuntó.

El balear comentó que estas semanas pasadas habían sido "las dos mejores" de su vida en Mallorca. "Pasé el fin de semana con amigos, la familia, relajándome un poco. No he pasado un fin de semana en casa desde la Copa Davis contra Bélgica en febrero, así que lo necesitaba", confesó.