"Si Manzano piensa que los tiros vendrán solo de un lado, está equivocado". La "guerra", como denominó ayer el anterior propietario del Mallorca, Mateu Alemany, entre éste y el hasta el pasado 30 de junio entrenador de la primera plantilla rojilla, está declarada.

Alemany, con ganas de hablar y de rebatir la demanda presentada por Manzano en la que le reclama, junto a otros ex miembros del Consejo de Administración, unos dos millones de euros en concepto de honorarios impagados por su trabajo, y a la vez la disolución de la entidad, aseguró que los demandados "nos defenderemos con contundencia".

El ex propietario negó que Manzano fuera "un mero trabajador" en el club, como el entrenador califica en la demanda. "No es verdad. Era un alto cargo y el mejor retribuido de la entidad. Era una figura importantísima en el organigrama y sus decisiones deportivas tenían repercusión en la situación económica. Esta responsabilidad no la puede eludir". Incluso le acusó de realizar "una política de obstrucción a la cantera, lo que ha provocado la diferencia entre ingresos y gastos".

Alemany mostró su indignación con Manzano, de quien dijo que sufre "alzheimer selectivo" ya que "parece haber olvidado" que él mismo le pidió al abogado que "regresara, y tengo testigos", aseguró. "Lo hizo reiteradamente, de forma privada y pública. También ha olvidado la situación deportiva a 15 de enero de 2009 –fecha en que Alemany tomó de nuevo las riendas del club tras la etapa de Grande– cuando el Mallorca sumaba catorce puntos en 19 jornadas y sólo tres en los últimos once partidos. La decisión que se había tomado era que un técnico que suma tres de 33 puntos no puede continuar en su cargo. Y ha olvidado que yo defendí su continuidad contra la opinión de la mayoría", recordó.

Añadió más. "Si (Manzano) está en el Sevilla es gracias al Mallorca. Este club le ha servido de trampolín. Lo cierto es que él está en el Sevilla y el Mallorca en concurso de acreedores".

Uno de los argumentos que utiliza la defensa de Manzano en su demanda contra Alemany y varios miembros del Consejo para solicitar la disolución del Mallorca es que el pasivo supera al activo. "Demostraremos que el activo es superior al pasivo", respondió Alemany. "Pero independientemente de que lo demostremos o no –añadió–, cualquier cosa antes de disolver la sociedad", de la que dijo que "está a salvo" porque se encuentra en concurso. "El activo del Mallorca son sus jugadores, el valor del estadio, la plaza en Primera, de un valor incalculable, Son Bibiloni", explicó.

Alemany admitió que el actual entrenador del Sevilla "no tiene responsabilidad jurídica porque no firmaba contratos ni era el administrador de la compañía, pero sí moral. El tomaba decisiones en fichajes, en primas y en otros temas que afectaban a la parte económica. Está claro que hubo una intervención y no era un mero trabajador. La guerra no la he abierto yo, la ha declarado él. Si piensa que los tiros solo vendrán de un lado, está equivocado".

Alemany finalizó con su particular visión de Manzano: "Si le pagas eres su amigo, si no, no", y aconsejó al técnico de Jaén "que se olvide de nosotros".