Todavía restan tres meses para que finalice la Liga, pero Gregorio Manzano ya está haciendo las maletas. Al menos eso dejó entrever en el blog que publicó ayer al mediodía en la web del Mallorca. No obstante, tras la repercusión mediática que tuvo su carta a lo largo de la jornada, el técnico se apresuró a matizar que sólo hacía un balance de estos cuatro años. Sin embargo, sus palabras suenan a una despedida en toda regla. El técnico agradece a todos los estamentos del club, afición e incluso prensa el apoyo en este tiempo en los que ha estado al frente del banquillo. Sólo quería pasar revista de los cuatro años que lleva en la entidad desde que regresó en su segunda etapa, pero su discurso es el de una persona que pretende concluir su estancia en la entidad. "A los mallorquinistas que sienten de verdad el club y lo llevan en el corazón, a todos ellos les doy las gracias y les pido disculpas si en estos cuatro años no he podido alcanzar las metas que hubieran deseado", escribió.

La continuidad de Manzano, que acaba contrato el próximo 30 de junio, estaba en el aire desde hacía varios meses. El incierto futuro institucional siempre se ha utilizado de excusa para aparcar esa decisión. Alemany desconoce si habrá un nuevo propietario y a Manzano le gustaría saber cuál es el proyecto para el curso siguiente. Y como ahora mismo no se puede saber ninguna de las dos cosas, todo queda en una incógnita.

Futuro incierto

Pero hay un trasfondo que sí se conoce. La más que probable entrada del club en el concurso voluntario de acreedores provocará una drástica reducción en los sueldos de los trabajadores, algo que también incluye al cuerpo técnico. Manzano gana actualmente 1,8 millones por año, una cifra que deberá rebajarse de forma sustancial para el próximo inquilino del banquillo. De hecho, la idea es que no supere los 300.000 euros, otro obstáculo más para que el jienense continúe.

Además, la excelente temporada que está cuajando el Mallorca ha elevado su cotización en el mercado nacional y algunos clubes podrían pensar en el de Bailén para la próxima campaña. El Valencia, Sevilla o Villarreal son clubes que ya han sonado más de una vez para hacerse con sus servicios, aunque luego no fructificara. Si los rojillos se meten en Liga de Campeones podrían cambiar las cosas, pero parece complicado. De momento ya lo dice en el blog. "El Real Mallorca siempre formará parte de mi vida personal y profesional".