Un polémico penalti en el tiempo añadido, transformado por el mexicano Guardado en el minuto 96, hundió aún más al Atlético de Madrid (2-1) y permitió al Deportivo dormir en puestos de Liga de Campeones. El colegiado andaluz Paradas Romero hizo de las suyas durante todo el partido, negó dos penaltis al Deportivo, pero pitó el que menos se esperaba y permitió que los coruñeses completaran la remontada.

El encuentro terminó mal para el Atlético, pero no pudo empezar mejor para los madrileños, que se encontraron con un regalo de Lopo a los tres minutos que el argentino Agüero no desaprovechó.