El centenario de la Real Federación Española de Fútbol regala a los aficionados un encuentro que nada tiene de amistoso, con la Argentina de Diego Armando Maradona en busca del prestigio perdido ante la España de la excelencia de Vicente del Bosque, que rompe récords camino de un soñado triunfo en el Mundial.

Lo celebrarán con uno de los mejores partidos del planeta. Juntando en el estadio Vicente Calderón a muchos de los mejores jugadores del mundo entre la Roja, formada por la generación de oro del fútbol español, y la albiceleste encabezada por Leo Messi, en su búsqueda por aportar su verdadero nivel a Argentina.

La ausencia de Fernando Torres, por lesión, deja a Del Bosque sin quebraderos de cabeza entre sistemas y le pone en bandeja la posibilidad de alienar uno de sus onces tipo, con cinco centrocampistas y la entrada en escena de uno de los jugadores en mejor forma del fútbol europeo: Cesc Fábregas.

Líder del Arsenal, ha marcado Cesc en tres meses de temporada once goles. Sus mejores registros con seis tantos en la Premier, tres en Liga de Campeones y dos con la selección. Junto al momento de afianzarse del 10 de la Roja, aparece por la selección el deseado Jesús Navas. El andaluz ofrece a Del Bosque aspectos futbolísticos que no tiene en su actual grupo. El desborde y descaro de un extremo nato que ha destrozado sus miedos personales para intentar entrar en la lista de elegidos al Mundial. Puede debutar el mismo día que lo haga su amigo Perotti condefinidos como Argentina. Dos jugadores "únicos".

Pero, en esta ocasión, España tendrá enfrente el hambre de recuperar gloria de Argentina, que intentará encontrar el prestigio perdido durante la fase de clasificación para el Mundial de Sudáfrica, del que estuvo a punto de apearse en el último encuentro ante Uruguay, donde logró el billete de forma agónica.