Inquietud e intranquilidad entre los aficionados del Mallorca que ayer acudieron a Son Moix en cuanto al futuro de la entidad rojilla. "¿El Mallorca, desaparecerá de verdad?", preguntó Nofre Llompart, que añadió: "Es triste que nadie quiera al club y que ahora, cuando apenas han pasado dos meses, digan que lo quieren vender". "Espero que no haga igual que cuando compraron el Lorca, al que dejaron en la estacada", señaló Joan López sobre la actual propiedad del Mallorca. Para Bernat Seguí, el problema radica en la actual crisis: "No hay dinero suficiente para pagar a la plantilla, pero este señor –en referencia a la propiedad– ya sabía donde se metía cuando compró, ahora que no se queje".