Mateu Alemany, ex propietario y presidente del Real Mallorca, ha requerido por vía notarial a Javier Martí Mingarro, actual poseedor del 94 por ciento de las acciones del club, por el impago de un pagaré de 500.000 euros. El abogado mallorquín ha tomado esta drástica decisión después de la reunión que ambos mantuvieron el pasado jueves por la noche en el despacho del presidente de la entidad mallorquinista, Tomeu Vidal.

En el encuentro, muy tenso según las fuentes consultadas por este periódico, Alemany recriminó a su interlocutor la falta de seriedad mostrada hasta el momento y, de forma contuntende, le dijo: "No os vendí el club para que no cumplieráis con vuestros compromisos".

A Alemany, a quien el banco le ha cobrado 20.000 euros de gastos, se le abren varias posibilidades en el caso de que Martí Mingarro no cumpla con sus compromisos económicos. La principal, que con la escritura de compra venta en la mano, podría retroceder la operación por incumplimiento de contrato y recuperar la propiedad del club, que vendió el pasado 7 de agosto.

Alemany, consciente de que su imagen y prestigio está en juego –en la presentación de traspaso de poderes destacó la seriedad de los compradores–, reclamó a Martí Mingarro que aclare su proyecto económico, si es que tiene alguno, y que dé la cara ante la afición para que se conozca el estado real de la situación, que a nadie se le escapa que es agónica por la falta de liquidez de la entidad.

Alemany no tiene ninguna intención de recuperar la propiedad y, según personas de su entorno, únicamente volvería si no queda más remedio. Es decir, si la institución se ve abocada a un concurso voluntario de acreedores, una hipótesis que ni mucho menos se descarta.

Lo que ha molestado a Alemany, entre otros factores, es que Martí Mingarro haya contado a sus consejeros que la auditoría que se le presentó no corresponde con la situación actual. En el contrato de compraventa el grupo Safín, propiedad de Javier Martí Mingarro, reconoce haber estudiado toda la documentación referida a las auditorías, tanto externas como internas y, con su firma, dar su conformidad a la operación.

Mientras, el hijo del dueño, Javier Martí Asensio, quien se recupera de una dolencia que le obligó a pasar por el centro La Paz de Madrid, no asistirá al partido de esta tarde en Palma frente al Racing. No está pendiente del tema económico, pero sí del deportivo, que le vuelve loco. El consejero delegado, pese a que el pasado miércoles dijo en una entrevista a DIARIO de MALLORCA que sus relaciones con Manzano han mejorado ostensiblemente, ya le busca sustituto por su cuenta para la próxima temporada. En las últimas semanas, aconsejado por sus asesores deportivos Gonzalo de Córdoba y Gori Muñoz, se ha reunido con Michael Laudrup, Juan Manuel Lillo y el italiano Alberto Zacheroni.

Los jugadores tienen hoy la palabra en el campo. Será interesante comprobar si han conseguido abstraerse del terremoto que asola al club o si les afecta, de qué manera.