Soler había aguantado estoicamente las cuatro primeras etapas, pero al no notar mejoría en su lesión decidió bajarse de la bicicleta. Sufre una fractura del piramidal de la muñeca derecha y una posible fractura del escafoides de la izquierda.

El ciclista colombiano, de 25 años, disputaba su segundo Tour de Francia, tras haber ganado en el primero el maillot de mejor escalador y haberse impuesto en la etapa reina, incluido el ascenso al Galibier.