19 de junio. Salida hacia Londres tras varios días de descanso.

Tras unos días de descanso después de ganar en Queen´s, su primer torneo en hierba, parte a Londres para aclimatarse a la hierba de Wimbledon. "No soy el favorito", dice antes de tomar el avión, una frase que repetirá hasta el infinito hasta el día antes de la final con Federer. Por la tarde entrena.

21 de junio. Becker apuesta por Federer.

El tres veces campeón en Wimbledon afirma en The Daily Telegraph: "No puedes apostar en contra de Federer en hierba de la misma forma que no puedes apostar en contra de Nadal en arcilla. Es muy duro ir contra un quíntuple campeón".

22 de junio. Piropos en la prensa inglesa.

Santana en The Times: "Nadal es el hombre a batir, es el jugador con más confianza que he visto. Incluso si Wimbledon se jugara sobre hielo llegaría con confianza".

24 de junio. Saca como nunca en su debut.

Debuta en el torneo ante el alemán Andreas Beck y gana por 6/4, 6/4 y 7/6(0). Pero el mejor dato del partido está en su servicio. Logra 17 aces, su segunda mejor marca tras los 18 conseguidos ante Andre Agassi en 2006.

25 de junio. Despedida de Djokovic.

El serbio, número 3 del mundo, protagoniza el gran fiasco del torneo al caer en segunda ronda ante el ruso Marat Safin, a la postre semifinalista. Djokovic, admirador de Safin cuando aún era un desconocido, pierde muchos puntos y Nadal se asegura acabar el torneo como segundo del mundo.

26 de junio. La lista para Pekín.

Nadal ya sabe de forma oficial que irá a los Juegos Olímpicos de Pekín, en individuales y en dobles con Tommy Robredo. También irá Núria Llagostera. En segunda ronda se impone al letón Gulbis y cede su único set hasta la final.

28 de junio. Partido completo ante Kiefer.

Se cumple la lógica, y a medida que pasan los días, Nadal se siente más cómodo. Lo demostró ante el alemán Nicolás Kiefer, al que superó por 7/6, 6/2 y 6/3.

29 de junio. Disfruta con la victoria de la selección.

En la jornada de descanso, por la noche reúne a sus amigos, entre ellos Feliciano López, para presenciar la victoria de la selección española en la Eurocopa de fútbol.

30 de junio. El gran susto ante Youzhny.

Protagoniza el gran susto al patinar en el segundo juego y dolerse de su rodilla derecha. Fue atendido durante varios minutos por el fisioterapeuta, hasta dos veces. La tranquilidad no llegó hasta que el propio fisio le hizo un gesto al tío Toni de que todo iba bien.

2 de julio. Arrolla al ídolo local.

Sin ninguna duda, su partido más completo. Cinco juegos en blanco en el segundo set y sólo diez puntos perdidos con su servicio. "¿Se puede jugar mejor?", se le pregunta. "Yo no marco los límites, pero he jugado como nunca aquí", dijo Nadal.

3 de julio. Visita médica.

Su médico personal se traslada personalmente desde Madrid a Londres para examinar la rodilla derecha de Nadal, lastimada en el partido del lunes ante Youzhny. Todo está en orden, aunque habrá que hacerle un examen más exhaustivo al término del torneo.

4 de julio. Su partido más flojo.

En semifinales ante el alemán disputó un partido más que discreto. Aunque el resultado -6/1, 7/6 y 6/4- puede indicar que lo ganó con una relativa facilidad, lo pasó muy mal en el segundo set, que a punto estuvo de perder. Nadal, sincero, reconoció que no se había sentido cómodo y que no jugó bien.

5 de julio. Nadal se enfada.

El manacorí está harto de decir siempre lo mismo. Antes de su comparecencia ante los medios españoles, preparada por su jefe de prensa, no se escondió, y manifestó en voz alta que era "la rueda de prensa más absurda que he visto.Espero que seáis originales en las preguntas" dijo, dirigiéndose a los periodistas. Para colmo, y siendo casi las tres y media, aún no había comido.

6 de julio. El gran éxito.

El isleño logró ayer uno de sus grandes sueños. Después de cinco sets (6-4, 6-4, 6-7 (5), 6-7 (8) y 9-7) y dos interrupciones por la aparición de la lluvia, Nadal superó, tras 4 horas y 48 minutos, al que hasta ayer era considerado el mejor tenista sobre la hierba. El mallorquín estrecha su cerco para desbancar al número uno del mundo, suma su segundo Gran Slam del año y agranda su historial.