El presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, reiteró ayer que, para él, la moción de censura presentada contra la directiva, cuya votación será este domingo, es "injusta" y que "amputar" el mandato de la junta crea "inestabilidad" en el Barça, porque entiende que la comisión gestora que se crearía para gobernar el club en caso de que prospere la moción no podría fichar o vender jugadores.

"Honestamente, creo que esta moción es injusta y desproporcionada y que no hay razones objetivas para adelantar el final de nuestro mandato. Amputar este mandato crea inestabilidad en el club", dijo Laporta, durante la presentación de Gerard Piqué como jugador del Barça, aludiendo al hecho de que él no podrá aspirar a la reelección en 2010, cuando está previsto el final de su mandato.

Laporta mantuvo además su idea de que los estatutos establecen que una comisión gestora no puede realizar fichajes o traspasos de jugadores, cuestión que ha dado pie a diversas interpretaciones y que rechazan los promotores de la moción de censura. "La gestora tiene facultades limitadas y eso queda muy claro; no tendría ningún sentido que si tiene tres meses para convocar elecciones se dedique a fichar y vender jugadores", afirmó.

Por último, reiteró su confianza en recibir el respaldo de los socios en la votación del domingo, ante la que pidió que haya una participación alta, y no quiso polemizar con uno de los impulsores de la moción, Oriol Giralt, que le ha acusado de mentir. "No voy a entrar en el juego de las descalificaciones", dijo. Además, aseguró estar "ilusionado como nunca" para seguir dirigiendo el club.