"¡Sí, sí, sí, la Copa ya está aquí!". Así recibió Madrid ayer a la selección española, flamante campeona de la Eurocopa, que asistió a una impresionante fiesta que reunió en las calles de la capital a más de 500.000 hinchas, vestidos y ataviados con camisetas y prendas rojas.

Nunca antes se había vivido un festejo así con la selección española, que vive tiempos de euforia. Sus hinchas se sienten orgullosos al fin de llevar unos colores que huelen a campeón y Madrid recibió a sus héroes con honores de ´reyes´ de Europa.

Luis Aragonés, seleccionador español, e Iker Casillas, el capitán, fueron los primeros en abrir la puerta del avión nada más aterrizar en el aeropuerto de Barajas. Llevaban la Copa en la mano, el trofeo que les acredita como campeones de Europa. Su primer título en 44 años. Mucho tiempo, demasiado.

Después, fueron bajando cada uno de los integrantes de la expedición, con el resto de jugadores y los directivos. Todos ellos se subieron a un autocar descapotable, con el lema de "España siempre", y emprendieron viaje hacia la céntrica Plaza de Colón, el lugar de celebración de sus éxitos.

El autocar tardó unas dos horas en recorrer los 12 kilómetros que separan el aeropuerto de Colón. A un lado y otro de la carretera se agolpaban los aficionados. Muchos de ellos llevaban seis horas esperando a sus ídolos. Los jugadores no tardaron en ofrecer muestras de su euforia, saltando y cantando, con cervezas en la mano, mientras recibían el homenaje. Todos llevaban sus camisetas rojas, salvo Sergio Ramos, ataviado con una camiseta blanca en recuerdo del malogrado Antonio Puerta.

Reconocimiento total

El vehículo llegó a la Plaza de Colón bajo un tremendo calor. Unos 40 grados. Los jugadores bajaron del autocar y subieron al escenario para consumar la comunión con el pueblo. Tras posar con la Copa, se rompieron todos los protocolos. Casillas fue el primero en hablar y volvió a erigir en protagonista a Aragonés. "Este es el hombre que nos ha hecho ganar una Eurocopa 44 años después", dijo señalando al seleccionador. Entonces, toda la hinchada se puso a corear el nombre del veterano técnico, que deja la selección. Aragonés no tuvo más remedio que tomar el micrófono, venciendo su tendencia a quedar en un segundo plano. "La verdad es que la Copa la ha ganado un equipo, y es para vosotros", dijo a una afición que se volvió loca, antes de disfrutar con diferentes intervenciones de sus ídolos, en compañía de Manolo Escobar.