"Quiero que el público que salga del cine tras ver mi película diga: parece que he visto un documental", confiesa Marcos Cabotá (Palma, 1981) ante el estreno de Noctem, su primera incursión en el género de terror que puede verse a partir de hoy en once salas de toda España. El filme, dirigido a la "chavalería de veinte años", está protagonizado por Álex González, Esteban Piñero y Adrián Lastra, este último actor, el detonante de esta historia rodada en Mallorca, Madrid y México.

" Noctem tuvo un nacimiento curioso", señaló ayer Cabotá en Ocimax, donde se proyectará su película. "Hace tres o cuatro años un amigo, Adrián Lastra, me comentó que sentía una presencia paranormal en su casa. Me enseñó un vídeo, y yo, que no creo nada de estas cosas, noté que había una persona en la esquina de la habitación. Aquello me produjo un escalofrío, advertí aquella presencia, y decidí apoyar a Lastra al ver que lo estaba pasando mal, tanto, que llegó a vender la casa". La chispa estaba encendida, y Cabotá, un cineasta al que le gusta "ir saltando" de género en género, decidió probarse en el terror después de haberse estrenado con una comedia ( Amigos) y dirigir un documental ( I Am Your Father) que logró entrar en la carrera de los Goya.

Lo nuevo de Cabotá, que presenta a dos amigos que desaparecen estando en México y, un año después, encuentran sus teléfonos móviles repletos de grabaciones mediante las cuales intentan descubrir qué es lo que ha ocurrido, bebe del formato found footage, una técnica narrativa utilizada en las películas de terror ( El proyecto de la Bruja de Blair y Cloverfield) y los falsos documentales, que presentan una parte esencial del filme como si fuese material descubierto. "Más que hacer terror me apetecía contar una realidad. La película me ha sorprendido a mí mismo porque ni yo sabía por dónde iba a ir. Noctem roza el documental, con conversaciones que no estaban guionizadas", afirmó Cabotá.

El suyo fue un trabajo que se extendió más allá de la dirección. "Esta película está dirigida por los actores. Mi trabajo fue de psicólogo. Les dije que no tenía que interpretar nada, sino ser ellos mismos", comentó.

Del reparto, además de los protagonistas, destacan nombres conocidos por el público mallorquín, como los de Diego Ingold, Carles Molinet, Victoria Maldi o el diputado de Podem per Balears y juez en excedencia, Juan Pedro Yllanes. La música la firma Tolo Prats, ligado a Sonoteque.

Noctem se estrena tras proyectarse en cinco certámenes y cosechar algunos premios importantes, como los dos que obtuvo en el Festival Internacional de Cine Fantástico de Sant Cugat (el del jurado y el del público a la mejor película) o la respuesta que logró en el FANT de Bilbao. "La chavalería de veinte años es el público de esta película pero la mejor ovación la encontré en Bilbao", confesó Cabotá, quien recordó que en este festival se enfrentó a una sala tomada "por vascos gigantones de 40 años, algunos con camisetas de Iron Maiden", algo que le produjo cierto nerviosismo y temor, del que salió victorioso tras la proyección de su cinta.

"El público joven busca el terror", añadió el cineasta palmesano, que antes del estreno de su cinta quiso conocer la opinión de algunos espectadores en esta franja de edad. "Metimos a 30 chavales en un cine, alumnos de Jaume Carrió y Toni Bestard, y 25 de ellos sí pasaron miedo", recordó.

Cabotá aclaró que no es "un gran enamorado del género de terror", sino "un enamorado del cine". En cualquier caso sí reconoció que en su infancia, etapa en la que "el cine de terror es prohibitivo", fue víctima de títulos emblemáticos como Pesadilla en Elm Street (1984), película que le costó "cinco semanas sin dormir".

Tras Noctem, Cabotá regresará a la comedia, junto a Toni Bestard, con quien rodará en la isla "y también fuera de Europa", una "ambiciosa road movie".