La presa
Teatre del Mar (Palma)
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Autor: Conor McPherson. Dirección: Xavi Núñez. Intérpretes: Biel Bisquerra, Toti Fuster, Xavi Núñez (Josep Mercadal en la actuación del domingo), Pere Terrassa y Pep Uceda.
El aburrimiento, la envidia o la desdicha, y también el alcohol o simplemente la pulsión del ser humano por fabular o retorcer las imágenes, edulcorarlas, ampliarlas; todo es susceptible de convertirse en materia de base de historias extraordinarias. Y eso es La presa en esencia, una sucesión de relatos que parten de lo cotidiano y van creciendo entre fantasmas, hadas, resquemores y trenes que pasan hasta estrellarse con los conflictos interiores de cada uno de los personajes.
Quizá faltan más elementos de transición que enlacen mejor esas narraciones troncales (los recuerdo en la adaptación que hizo Broggi), tal vez falte algo de verosimilitud en las escuchas (¿No conocían esos hombres los episodios vividos y pensados por sus amigos?) y un poco más determinación a la hora de exponerlas, pero el conjunto me parece más que apreciable. Núñez (de nuevo dirigiendo, y haciéndolo bien) consigue mantener el interés por el pasado, presente y quizá el futuro de esos cuatro seres atrapados en un rincón de la Irlanda rural (Carrick-on-Shannon) y más concretamente en la barra de un pub que espera en letargo la llegada de los turistas alemanes -otros de los fantasmas que transitan la trama-. Ese es el mundo donde cuatro amigos, seguramente a su pesar, pugnan por la mejor ficción mientras acogen con cierta zozobra la presencia, misteriosa, de una mujer recién llegada de Dublín huyendo de su propio drama; ella es la historia en mayúsculas, la que hace espesar el montaje, la que le da sentido a todo.
