El ciclo literario y de debate Converses entre llibres llega bajo la temática Escriptores amb cambra pròpia, dedicada a la literatura clásica y contemporánea escrita por mujeres, que remite al título reivindicativo del ensayo de Virginia Woolf. Las obras seleccionadas quieren romper con el “tópico de literatura femenina”, afirmó el director insular de Cultura del Consell, Rafel Creus, en la presentación que tuvo lugar ayer en Rata Corner. El programa pretende “mirar literatura de autoras, para ver que no existe una literatura de mujeres”, ha recalcado la directora de la Fundació Casa Museu, Carme Castells, que añade “el único requisito es haber leído la obra para poder debatir”.

La selección de lecturas ha apostado por géneros como la novela, el ensayo o la poesía y por escritoras de diversa procedencia, época, tendencia y discurso. Los lectores podrán debatir en torno a la obra de Jane Austen, Sylvia Plath, Alejandra Pizarnik, Margaret Atwood, Sue Grafton, Emily Dickinson, Gloria Fuertes, Zadie Smith, Katharine Graham, Mercè Rodoreda, Montserrat Abelló, Maria Mercè Marçal y Maria Aurèlia Capmany.

Las librerías se nutrirán de la presencia de expertos y profesionales como las doctoras Sally Bayley e Isabel Granya, los críticos literarios Marina Porras y Jorge Carrión, las periodistas Pilar Garcés, del Diario de Mallorca, y Sandra Martínez, los escritores Maria Antònia Oliver, Dolors Miquel, Laia Martínez y Marcel Riera, entre otros. Coincidiendo con el verano, la tertulia se transformará en recitales poéticos en la Casa Llorenç Villalonga de Binissalem. Este ciclo ha sido organizado por el Departament de Cultura del Consell, la Fundació Mallorca Literària, La Casa Llorenç Villalonga, y en él colaboran las librerías Drac Màgic, Embat, Los oficios terrestres, Lluna, Quart Creixent y Rata Corner.“Austen no era nada inocente”

La primera sesión ayer versó sobre la novelista victoriana Jane Austen (1775-1817), a cargo de la escritora y crítica Marina Porras y del filólogo Jesús Revelles, en una tertulia bien documentada.

Austen ha tenido la capacidad de llegar a lectores universales durante dos siglos, convirtiéndose en un referente “de fondo”. Según Porras, no es una escritora “ingenua o inocente”, y se remite a su primera obra Amor y Amistad, que escribió con 15 años, historietas satíricas y burlescas que la sitúan en una posición “muy consciente del mundo en el que se mueve”. Pasó de una narrativa satírica a las grandes novelas donde “usa la ironía”. Una inocencia que no tiene lugar en su “decisión, en la estructura, en el diálogo y en el gesto”, relató. En un mundo donde la razón está por encima del sentimiento y con un estilo narrativo “que no juzga nunca”, Austen estableció unos valores morales que luego fueron un revulsivo para la literatura romántica, y que han generado debate y controversia entre críticos y colegas escritores de su época y posteriores.