El Ayuntamiento de Barcelona aprobó ayer -con los votos favorables de BComú, el grupo Demòcrata, ERC, CUP, PSC y el concejal no adscrito- una declaración institucional de apoyo al cantante mallorquín de rap Valtonyc, condenado a tres años y medio de cárcel.

En el texto también se manifiesta preocupación por la "deriva autoritaria del Estado expresada en la modificación del Código Penal de 2015", que habilita la extensión del delito de enaltecimiento del terrorismo e injurias a la Corona a casos como el de Josep Miquel Arenas, el artista conocido como Valtonyc.

El teniente de alcalde de Barcelona Jaume Asens, en nombre del Gobierno municipal, rechazó la sentencia porque "la monarquía no puede ser tratada como institución sagrada y debe ser sujeto a la crítica", además de sostener que esta condena vulnera el principio de igualdad porque el Rey no puede tener sobreprotección.

La concejal de la CUP Eulàlia Reguant destacó que la condena es un retroceso de derechos civiles y políticos, a lo que Jaume Ciurana (PDeCAT) añadió que "la libertad de expresión, sobre todo en el ámbito de la cultura, se tiene que defender como esencia de la democracia".

Juanjo Puigcorbé (ERC) apuntó que la condena de Valtonyc es una regresión democrática sin precedentes y que desea que el sector cultural reaccione, un mensaje en la línea del socialista Daniel Mòdol, quien espera que el movimiento por la libertad de expresión "siga luchando siempre para defenderla".

Por otra parte, Izquierda Unida quiere llevar al Congreso una proposición de ley para eliminar cinco artículos del Código Penal que considera "obsoletos" o "ambiguos" y que a su juicio se están utilizando para restringir la libertad de expresión. En concreto, plantea despenalizar el enaltecimiento del terrorismo, las injurias a la Corona y otras instituciones, la vejación de representantes religiosos o el ultraje a la patria.